La pareja inestable

Hay parejas inestables por incompatibilidad técnica o por desavenencias personales. Ninguno de estos imponderables afecta a Gonzalo Higuaín y Karim Benzema. Cada vez que se reúnen en el campo se entienden. Después de dos temporadas y media de convivencia en el Madrid, han conseguido un nivel de compenetración difícil de encontrar en el fútbol. El partido ante el Granada -uno de esos rutinarios y desequilibrados que tanto abundan en la Liga- sirvió para que exhibieran su destructora capacidad de asociación. No existe en el fútbol europeo un equipo con dos delanteros centro que sumen 23 goles. Sin embargo, José Mourinho prefiere no ponerlos juntos.

"Todos saben", explica el entrenador del Madrid, "que me gusta más jugar con un delantero fijo y con gente que juegue por las bandas y haga movimientos interiores. El equipo está jugando muy bien así y es así como hemos ganado todos los partidos. Jugando con Higuaín o Benzema en punta. Con uno de los dos. Así han dado buen rendimiento, han marcado goles y han asistido a otros. Hace mucho tiempo que el equipo juega bien de ese modo".

El francés puede brillar en la banda, donde el técnico del Madrid da prioridad a Di María

Mourinho no cambió el sistema contra el Granada. Se limitó a situar a Benzema en la banda derecha reemplazando a Di María. Arriba dejó a Higuaín. Desde la izquierda partió Cristiano Ronaldo. El Madrid se impuso por 5-1 contribuyendo a engordar una cifra goleadora que lo sitúa en un territorio desconocido. Nunca en su historia había logrado meter 61 goles en 17 jornadas.

Lo más parecido al bombardeo actual se registró hace medio siglo, en la temporada 1960-1961, cuando en el Madrid coincidieron Di Stéfano y Puskas. Aquel equipo, piedra fundamental de un club legendario, metió 53 goles en 17 jornadas. Ocho menos que el actual Madrid.

La estadística sería impensable sin la deflación económica que afecta al fútbol europeo y que ha hecho posible que el Madrid, a la cabeza de un grupo cada vez más restringido de instituciones con poder de compra, haya reunido en una misma plantilla a varios de los 10 mejores atacantes del planeta. Los promedios de Higuaín y Benzema son equiparables a los de cualquiera de los más grandes nueves que ha tenido el fútbol español. Esta temporada, Higuaín lleva 13 goles (uno cada 61 minutos). Su compañero francés ha hecho 10 (uno cada 81 minutos). Con los dos bastaría para poner al Madrid entre los aspirantes a cualquier título. Pero en la plantilla también juega un tal Cristiano, que suma 21 goles (uno cada 70 minutos).

La presencia de Cristiano y el fichaje de Di María en 2010 han deshecho la posibilidad de afianzar una pareja que, en otras circunstancias, podría marcar una época. A pesar de que Benzema, como demostró ante el Granada, puede ser un excelente extremo derecho, Mourinho prefiere ocupar ese puesto con Di María. El argentino es el futbolista favorito del entrenador. Los partes médicos dicen que sufre una lesión, pero sus compañeros creen que solo se está reservando por orden del técnico, que lo pondrá si se disputan los clásicos contra el Barça en la Copa.

Desde que Higuaín y Benzema coinciden en el Madrid, 2009, el equipo ha disputado 119 partidos entre la Liga y la Champions. Sin embargo, los puntas solo se han encontrado en la formación titular en 13 ocasiones: 11 victorias, un empate y una derrota.

Las cifras lo atestiguan: son una inestable pareja explosiva.