"Rubalcaba conoce mejor España"

Aunque limítrofe con Gipuzkoa, Ermua es una de las tres únicas localidades vizcaínas que gobiernan los socialistas vascos tras la debacle del 22-M. Su alcalde, Carlos Totorika, fue el jueves uno de los representantes del PSE en la presentación de Pérez Rubalcaba como candidato a la secretaría general del PSOE.

Pregunta. ¿Fue usted de los que quiso trasladar con su presencia su apoyo a Rubalcaba?

Respuesta. Creo que puede ser el líder a la altura de las complicadas circunstancias en las que estamos. La capacidad de liderazgo es fundamental en un momento como este y él la tiene, además de un conocimiento de la articulación de España más profundo que el de otra gente más joven.

P. ¿Está el PSE con Rubalcaba?

R. Los votos en el congreso serán individuales y secretos, aunque es cierto que puede haber opiniones generalizadas según las zonas, que no tienen por qué compartir, eso sí, sus respectivos afiliados. A título particular, creo que Rubalcaba tiene muy buena acogida en Euskadi.

P. ¿Por qué?

R. Por la cercanía que siempre ha tenido. Desde su nacimiento en Solares (Cantabria), a las difíciles vivencias que ha compartido con los socialistas vascos durante la amenaza de ETA. No hay que olvidar que su política antiterrorista ha resultado decisiva para el fin de la banda.

P. ¿Por qué no hubo entonces una representación más destacada de dirigentes vascos en su presentación?

R. Entiendo que el posicionamiento de los líderes territoriales llegará poco a poco, ya que estamos ante un proceso largo que no ha hecho más que comenzar.

P. ¿Comparte su idea de un discurso unitario para toda España?

R. Los socialistas hemos sido quienes hemos impulsado la España de las autonomías. La pluralidad es una realidad y nos enriquece, pero no es contraria a la necesaria solidaridad entre territorios y a una visión unitaria del país, más allá de sus particularidades culturales e incluso económicas.

P. ¿Le preocupa que el PSC pueda no compartir esa visión?

R. Yo creo que la mayoría de los socialistas catalanes están a gusto en España y que comparten esa visión solidaria. La expectativa de poder modificar sin límites la Constitución no es lo más acertado.

P. ¿Comparte la visión abierta del proceso de primarias?

R. Abrirnos a la ciudadanía puede ser fundamental en este momento, en el que se imponen los medios electrónicos y un creciente alejamiento de la población hacia la política. Los socialistas creemos en la democracia, externa e interna, y me alegro de que sea una apuesta compartida.

P. Clases medias, tercera edad... ¿Ha estado desenfocado el punto de mira?

R. Está claro que hay que afinar más. Que seamos un partido obrero no quiere decir que quienes trabajan con la cabeza sean ajenos. Nos tienen que preocupar sus problemas, al igual que los de una tercera edad que cada vez gana más peso. Sin olvidarnos, eso sí, de los problemas específicos que afectan a la juventud o de encontrar respuestas a las preguntas que la sociedad nos hace, como qué pasa con los bancos.

P. ¿Y puede llegar esa respuesta desde el ámbito nacional?

R. Las soluciones a una crisis global no pueden llegar desde el ámbito local, pero sí europeo. Por eso hemos puesto sobre la mesa la necesidad de una acción común de la socialdemocracia para reconducir la gestión financiera y dar respuesta a los problemas que en los últimos tiempos nos han dejado descolocados.