El peso de la población jubilada frente a los jóvenes crecerá 20 puntos en 2021

El peso de la población mayor de 65 años frente al de los jóvenes se acrecentará en la próxima década hasta que por cada 100 menores de 20 de años haya 158 personas en edad de jubilación. La proyección de población del Instituto Galego de Estatística (IGE) para 2021 dibuja una sociedad más envejecida, con 113.000 muertes más que nacimientos en la década; un rural más despoblado en el que solo las ciudades de Santiago y Pontevedra ganan vecinos y lo hacen a costa de los movimientos de población; una pérdida de habitantes del 3,2% que se acentúa más, hasta llegar al 7%, en las provincias de Lugo y Ourense.

El porcentaje de ancianos se irá incrementando hasta sumar 20 puntos más que en este año. En enero de este año, los menores de 20 años sumaban 433.048, mientras que los mayores de 65 eran 603.706. Es decir, 100 jóvenes por 139 jubilados. Cuando comience en año 2021, si se mantiene el ritmo actual, habrá 11.000 jóvenes menos y 64.000 mayores más. La comarca gallega más envejecida seguirá siendo la de Lugo oriental (A Fonsagrada, Os Ancares y Sarria) con 378 ancianos por 100 jóvenes. Sin embargo, es Ourense donde tiene y tendrá más peso la población de mayores de 65 años frente a los jóvenes. La proporción de tres veces más ancianos que menores de 20 se dará también en las comarcas ourensanas de Allariz-Maceda, Terra de Caldelas, Trives, Valdeorras, A Limia, Baixa Limia, Terra de Celanova, Verín y Viana, así como en las lucenses de Chantada, Quiroga y Terra de Lemos.

La comarca de Ferrol presenta el mayor desequilibrio entre muertes y nacimientos

En el caso de esta última comarca, por ejemplo, el 25,8% de la población mayor de 65 años tendrá también, en una década, más de 84, lo que el IGE define como sobreenvejecimiento. Sucederá también en Lugo Oriental y en la zona de O Carballiño y O Ribeiro. Las zonas que se mantendrán con un índice de envejecimiento más bajo serán las áreas de influencia de las ciudades de Vigo, Pontevedra y Santiago, además de O Morrazo y el área de Caldas de Reis y O Salnés. Santiago y Pontevedra serán también las únicas ciudades que ganen población aunque en porcentajes muy bajos, del 3% y el 1,5% respectivamente. Vigo no gana vecinos, pero sí los ayuntamientos del sur de la ciudad, en concreto las comarcas de Paradanta, Baixo Miño y O Condado, con un 0,3% más. En el norte de Vigo, O Morrazo mantendrá su población. Sus datos contrastan con los de Lugo Oriental, que en una década perderá el 15,7% de sus habitantes, y los de O Carballiño y O Ribeiro, que disminuirá su población en un 13,3%.

Las áreas que ganan habitantes lo harán a costa de los movimientos de población porque todas las comarcas de Galicia tendrán un saldo vegetativo negativo en 2021. El IGE calcula que en los próximos diez años nacerán unos 195.000 niños y habrá 307.000 defunciones. Una diferencia de unas 112.000 personas. La peor perspectiva es para la zona de Ferrol, Eume y Ortegal, donde se registrarán casi 12.000 defunciones más que nacimientos. El sur de Ourense mejora, pero poco, los datos del norte de A Coruña: en Limia, la Baixa Limia, Terra de Celanova, Verín y Viana el saldo negativo es de casi 11.000. Le sigue el área urbana de Lugo y la de Ulloa, Meira, Terra Chá. Las zonas donde hay más equilibrio entre nacimientos y defunciones, aunque siempre con el símbolo de menos delante de la cifra, son, de nuevo, O Morrazo, Pontevedra y Santiago.