El PP deja el futuro de Novagalicia Banco en manos de sus gestores

La continuidad de Novagalicia Banco en solitario sin ser absorbido por otro más grande "depende fundamentalmente de la capacidad de sus gestores para recapitalizar la entidad y que pueda seguir contando con un número de clientes suficiente para mantenerse en el mercado". El diagnóstico es de Pedro Puy, portavoz parlamentario y cerebro económico del PP, además de estrecho colaborador del presidente, Alberto Núñez Feijóo.

Ayer Puy evitó derrochar optimismo, ni pesimismo ni todo lo contrario sobre el futuro del banco en una más que probable segunda oleada de concentraciones financieras. "Hago votos para que así sea, confío en la capacidad de los gestores para sacar adelante un proyecto que es importante para Galicia y cabe desearles lo mejor para que se mantenga en el mercado". ¿Qué puede hacer la Xunta ahora que la suma de Caixanova y Caixa Galicia se ha diluido en un banco del que apenas controlan el 7%? Según el PP, aparte de recurrir la valoración de la caja fusionada que hizo el Banco de España "sin dar audiencia ni explicar sus criterios", poca cosa más que ofrecer su apoyo explítico y enfríar la comisión de investigación parlamentaria que Feijóo prometió impulsar para saber qué pasó en las entidades gallegas y qué responsabilidad tuvieron sus gestores para que la entidad haya tenido que ser rescatada con 3.600 millones de euros de dinero público.

Esa fiscalización en el Parlamento no se llevará a cabo hasta que se culmine el proceso "que acaba de empezar" de recapitalización del banco o se certifique que este ya no es viable. Los populares parten de la idea de que airear los trapos sucios del pasado no ayudaría en nada a los gestores mientras tratan de captar dinero. Así que de momento la investigación queda aparcada. Por mucho que los empresarios de Vigo hayan virado de momento la cara a ese proyecto al que solo Manuel Rodríguez (de Rodman) aportó fondos, los populares no tienen constancia de que haya un boicot desde el sur de Galicia a la operación que pilota el empresario coruñés José María Castellano.

Mientras en otra sala del Parlamento, el portavoz del PSdeG, Abel Losada, recriminaba a Feijóo que haya bajado las orejas con el Gobierno central ahora que manda Rajoy, Puy defendió que la prueba contra semejante teoría es el recurso judicial contra la valoración de la caja fusionada. O el que mantiene el Gobierno gallego también ante el Tribunal Constitucional en contra de la financiación autonómica y por el que reclama 805 millones a Madrid. Sobre el alargamiento del plazo de cinco años que la Xunta tiene para devolver al Ministerio de Economía más de 2.000 millones por los anticipos recibidos en 2008 y 2009, el dirigente del PP aseguró que Rajoy tiene "una predisposición favorable a atender esa demanda que aliviaría las tensiones de gasto de las comunidades autónomas".