Cae una banda mafiosa que extorsionaba a negocios chinos

El Cuerpo Nacional de Policía ha truncado las ansias de expansión de la mafia china en Málaga con la desarticulación de una banda que se dedicaba a exigir dinero a los propietarios de restaurantes chinos a cambio de una supuesta protección.

Los cuatro detenidos, tres hombres y una mujer de entre 23 y 44 años, han ingresado en prisión preventiva. Entre ellos se encuentra el líder del grupo, un ciudadano chino que ya participó en hechos similares en Madrid y por los que estuvo en la cárcel. Tras recobrar la libertad, había decidido instalarse en Málaga.

Las primeras denuncias llegaron en octubre, aunque los agentes tienen constancia de que el grupo comenzó a amedrentar a sus compatriotas en verano. El cabecilla se rodeaba de personas que ya habían trabajado para él en Madrid, y otros nuevos que había reclutado en Málaga.

En una de las visitas en las que no consiguieron que el dueño del restaurante les pagara, comenzaron a golpear a otra de las personas que había en el establecimiento y le rasgaron la mejilla con un cuchillo desde la comisura de la boca. Este corte se conoce como la sonrisa del payaso, según fuentes policiales.

El jefe había abierto un casino clandestino en un polígono de Málaga, que le servía para conocer a los empresarios de la ciudad y para entablar contactos. Los investigadores también atribuyen a otros miembros del grupo un robo con violencia en un negocio de Málaga, en el que lesionaron a la víctima y se llevaron un portátil, 1.000 euros y un móvil.