Versos en torno a la Alhambra

En las paredes de la Alhambra centenares de versos guardan la memoria de una melancolía antigua, de un pasado lleno de historias sobre la colina roja. El monumento nazarí es uno de los libros de poemas más lujosos jamás construidos. Tal vez por eso, ha sido objeto de inspiración para muchos poetas que desde su construcción han visitado el monumento con la mirada del que busca un secreto.

El poeta granadino José Carlos Rosales presentó ayer el libro Memoria poética de la Alhambra, publicado por la Fundación Lara con el apoyo del Patronato de la Alhambra y el Generalife. Se trata de una antología con más de cien poemas que tienen como elemento común el monumento nazarí.

"Son textos vinculados con diferentes recintos de la Alhambra que mantienen una notable unidad estética. Además, desvelan la profunda interdependencia que existe entre la historia de la literatura hispánica y el recinto nazarí", explica el autor, para quien "la Alhambra que hoy vemos y apreciamos no sería la misma si, desde fechas muy tempranas, la literatura no la hubiera acogido bajo su protección".

Desde los romances fronterizos de la Reconquista hasta los poetas actuales, la antología recopila textos escritos a lo largo de más de cinco siglos de fascinación. Garcilaso de la Vega, San Juan de la Cruz, Lope de Vega, Góngora, Zorrilla, Juan Valera, Rubén Darío, Unamuno, Villaespesa, Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca, Borges, Ángel González o Álvaro Mutis son algunos de los nombres recogidos en la selección, que se acompaña de un apéndice con información sobre los autores y las circunstancias de composición de los poemas.

"Es imposible señalar dos o tres nombres, pero a mí personalmente me gustan sobre todo los últimos poetas, autores nacidos ya bien entrado el siglo XX, como Álvaro Mutis o María Victoria Atencia, que pueden escribir liberados de las exigencias más orientalistas o exuberantes; la profundidad alcanzada en los versos de Francisco Díaz de Castro o de Ángel González no es fácil encontrarla en épocas anteriores", aclara Rosales.

Como curiosidad, el libro incluye un descubrimiento literario. Se trata de un soneto escrito en el álbum de firmas de la Alhambra por Pedro Antonio de Alarcón y que no se encuentra en sus obras completas.