_
_
_
_
Reportaje:breakingviews | Laboratorio de ideas

Nada de media pensión

La eurozona se endurece a medida que aumenta la división en Europa

Al final, no fue ni un bazuca ni una ruptura. A quienes esperaban algo más dramático de la cumbre de la eurozona puede que les parezcan más bien prosaicas las reformas, posiblemente de largo alcance, acordadas por sus dirigentes. El plan a largo plazo no aborda las preocupaciones inmediatas de los inversores respecto a las cargas de deuda de algunos países. Pero junto con unos recursos para rescates mejorados, y el apoyo del Banco Central Europeo al sector bancario, el paquete podría dar tiempo a los Gobiernos para demostrar que han empezado a tomárselo en serio. Siempre y cuando, claro está, empiecen a poner en práctica el plan rápidamente.

El melodrama ha corrido a cargo de Reino Unido, que se ha negado a aceptar unos cambios en los tratados de la UE que habrían dado más fuerza a las reformas. Se arriesga a quedarse aislado ahora que a los 17 miembros básicos de la eurozona se les unen los otros nueve Estados de la UE en la tarea de redactar el borrador de un nuevo tratado intergubernamental.

Dos de las reformas pactadas reestructurarán profundamente la unión monetaria con el tiempo. La primera es el compromiso de fijar límites para el déficit en las constituciones nacionales, con la supervisión final del Tribunal de Justicia europeo. La segunda es la aceptación de sanciones casi automáticas para los países que no obedezcan. Adelantar a mediados de 2012 la entrada en funcionamiento del Mecanismo de Estabilidad Europeo, permitirle tomar algunas decisiones por mayoría y abolir su imprudente disposición de imponer quitas a los acreedores privados también son buenas ideas. La cantidad total de dinero para rescates seguirá estando limitada a 500.000 millones de euros, como quiere Alemania, pero se abre la puerta a una reevaluación el año que viene. Finalmente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) recibirá 200.000 millones de euros adicionales.

Todavía hay que convencer a los inversores. Los intereses de los bonos del Tesoro italiano a 10 años, por ejemplo, vuelven a rondar el umbral psicológico del 7%. Pero suponiendo que los Gobiernos de la eurozona actúen con rapidez para precisar los detalles y poner en práctica las reformas, pueden esperar que los mercados acaben captando el mensaje con el tiempo.

Habrá otras crisis. Portugal podría necesitar más dinero de rescate, y también Irlanda. Italia no puede permitirse titubeos en su esfuerzo de reforma y el nuevo Gobierno conservador de España todavía debe cumplir lo que prometió durante su campaña electoral. Una recesión grave empeoraría los déficits nacionales y requeriría más flexibilidad del BCE. Al menos, parece que el presidente del Banco Central, Mario Draghi, se alegra de que la eurozona haya presentado el "pacto fiscal" que él había pedido. En los próximos días, esta alegría podría contribuir a tranquilizar a los mercados más que los compromisos y promesas gubernamentales, por serios que sean. -

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_