La oposición critica la ruina de los grandes eventos
La oposición, a través del PSPV y Compromís, arremetió ayer contra la decisión de la Generalitat valenciana de vender sus proyectos estrella, en unos casos, y de asumir en otros empresas privadas con deudas. Ambas formaciones coincidieron en señalar "la ruina" de los denominados grandes eventos y exigieron responsabilidades al PP por su mala gestión.
El portavoz de Economía y Hacienda del grupo socialista en las Cortes Valencianas, Julián López, aseguró que el presidente valenciano, Alberto Fabra, "está malvendiendo el patrimonio de todos los valencianos y comprando empresas privadas ruinosas, cuyas deudas asumirá sin tapujo alguno".
El Consell, según López, se hará cargo "de las deudas privadas generadas por el fiasco económico de los grandes eventos", lo que demuestra que Fabra "ha ido un paso más allá que su antecesor al continuar 16 años de despilfarro y nacionalizar la ruina privada generada por el PP".
López destacó que esas decisiones añaden "más oscuridad a donde ya faltaba transparencia porque la Generalitat no puede asumir las cargas de una fórmula 1 que en 2014 nos habrá costado 110 millones de euros". Mientras tanto, "no puede pagar" los medicamentos, tiene a escolares en barracones, "deja hospitales a medio construir y no paga a las personas dependientes y sus familias", aseveró el diputado.
Plan de liquidez
La diputada autonómica de Compromís, Mireia Mollà, señaló que los proyectos estrella del PP en la provincia de Alicante (Terra Mítica y Ciudad de la Luz) han dejado "un enorme agujero económico cuyo responsable es el PP". "La venta de estos proyectos no exime al PP de responsabilidades por este agujero económico que nos han dejado", abundó. La diputada autonómica también criticó que ningún responsable del Consell "haya reconocido los errores cometidos y la mala gestión".
"Compromís ya propuso hace más de medio año un plan de liquidez y rentabilización de espacios e infraestructuras de la Generalitat, entre los que se incluía la venta o alquiler del Ágora, el Palacio de las Artes y la Ciudad de la Luz para obtener recursos económicos", argumentó Mollà.
Para la diputada de Compromís es "una buena noticia que el Consell se deshaga de estos edificios que solo suponen una sangría de dinero a las arcas públicas".
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