Fabra renuncia a blindar la inversión del Estado en 2012

El PP valenciano evitará plantear a corto plazo al nuevo Gobierno de Mariano Rajoy la reforma del Estatuto de Autonomía para que se garantice que el Estado destinará a la Comunidad Valenciana durante siete años inversiones por un valor equivalente al peso de la población en el conjunto de España. El denominado blindaje de inversiones, que los populares se negaron a introducir en la reforma estatutaria de 2006, pactada con los socialistas, porque lo consideraban inconstitucional, fue aprobado de urgencia a finales de la legislatura pasada dentro de la batería de exigencias ante supuestos agravios comparativos con la que el partido de Alberto Fabra asedió al Gobierno del socialista Rodríguez Zapatero.

Blasco dice que no hay "interés dilatorio por parte del PP"

El Consell evaluó la reforma en 500 millones anuales en inversiones

Ahora, sin embargo, no hay prisa. Como reveló ayer el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, el PP renuncia a que esa reforma "urgente", que el PSPV-PSOE apoyó en las Cortes Valencianas, se plantee para que pueda tener efecto en los presupuestos de 2012. "El presidente Fabra ha decidido paralizar la reforma del Estatuto de Autonomía", aseguró Alarte, que recordó cómo el calendario de las Cortes prevé un único pleno ordinario, la semana que viene, antes del debate de presupuestos, y al no incluirla, dado que hay vacaciones parlamentarias en enero, la elección de los parlamentarios valencianos, entre uno y tres, que defiendan ante las Cortes Generales la reforma no podrá ser comunicada al presidente del Congreso de los Diputados antes de febrero. El PP quiere paralizar la reforma "con excusas ridículas", sentenció el líder de los socialistas valencianos.

Se refería al argumento que esgrimió el portavoz popular, Rafael Blasco, que consideró que "no tiene sentido" que las Cortes Valencianas decidan quién defenderá la reforma del Estatuto de Autonomía "si aún no está constituido el Congreso de los Diputados". Blasco dijo que no hay "ningún interés dilatorio por parte del PP".

Para el portavoz de la Coalició Compromís, Enric Morera, "ya no llegamos a tiempo". Morera añadió que la reforma del Estatuto de Autonomía de 2006 pactada por populares y socialistas "fue un mal negocio" para los valencianos. Según el portavoz de Compromís, la coalición cuenta ahora en el Congreso de los Diputados con un parlamentario, Joan Baldoví, "que sacará tarjeta roja si nos siguen marginando".

"El PP no está muy cómodo ofreciendo a Rajoy una propuesta de reforma estatutaria", consideró el diputado de Esquerra Unida del País Valencià Ignacio Blanco, quien, de todas maneras, consideró un poco "absurdo" el conflicto entre populares y socialistas.

El pasado febrero, cuando se debatió en las Cortes la reforma, el consejero de Gobernación, Serafín Castellano, justificó que estaba a favor de la cláusula de blindaje porque, aunque el Tribunal Constitucional dijo que no obliga al Estado, el Gobierno ha venido respetándola a la hora de elaborar los Presupuestos Generales para los territorios que disponen de ella, y cifró el beneficio de introducir esa disposición en el Estatuto en 500 millones de euros anuales, 3.500 millones a lo largo de los siete años de vigencia.