Golf sintético en Chamberí

El golf al alcance de todos. Esta parece ser la máxima que esgrime Green Canal, la concesionaria que desde hace cuatro años gestiona un campo de golf de nueve hoyos en las instalaciones del Canal de Isabel II, ocho pistas cubiertas de pádel y tres de fútbol 7. Todas ellas en el barrio de Chamberí, en las antiguas instalaciones del Canal de Isabel II. Además de los nueve hoyos, estas instalaciones disponen de una pista de 320 metros de longitud con un centenar de puntos de salida para practicar el swing. En total, entre 1.500 y 2.000 personas se apuntan de media, anualmente, a las clases de este deportes, a un precio de 59,50 euros mensuales, y que se alargan durante 11 meses. Para los ya iniciados, Green Canal, que pone a disposición de los usuarios 100.000 bolas, permite disfrutar durante una hora de la práctica del swing con un mecanismo de bolas automático, desarrollado por una empresa coreana. Una novedad en España. Pero lo primero que llama la atención es que todo el campo es sintético: "Se construyó así, y yo creo que fue por la sensibilidad del Canal hacia el uso del agua", explica el director general de Green Canal, Enrique Pérez Torices, que asegura que la utilización de las instalaciones de golf, pádel y fútbol 7 supera las 450.000 visitas anuales.

Los aficionados pueden practicar el 'swing' en el centro de Madrid

La ubicación del campo en un ambiente urbano permite que muchos de los usuarios abandonen sus trabajos durante una o dos horas para practicar. Y sin necesidad de subirse al coche. Por eso las clases de golf se imparten de forma relajada, muy lejos del estricto protocolo de este deporte. "Nosotros les decimos a los alumnos que vengan cómodos, pero no con chándal, ya que somos conscientes de las reglas del golf", explica Enrique Pérez Torices, que trata de mostrar un deporte que durante muchos años ha llevado la etiqueta de elitista. Algo que ya se ha superado.

Para incentivar a los alumnos, Green Canal organiza todos los meses un torneo entre los alumnos: "Es para que, poco a poco, tomen contacto con la competición. De esta forma, pueden comprobar cómo mejoran y acercarse a su objetivo de conseguir el hándicap". El hándicap o récord personal de un jugador de golf permite que los jugadores se federen, y por tanto puedan comenzar a practicar el deporte en cualquier instalación.

Mientras no disponen de este permiso, los aficionados al golf no pueden practicar en los campos. Y por eso estas competiciones permiten que los aficionados tomen contacto con estos terrenos de juego. Algo que en la mayor parte de las instalaciones de golf no se puede hacer.

"Lo mejor para saber si este deporte te gusta o no es participar en un curso intensivo de iniciación", argumenta Enrique Pérez Torices. Son 10 horas y vale 80 euros. Cada mes se ponen en marcha. No hay más que ponerse en contacto con la empresa, que incluirá a los interesados en uno de los horarios. En el caso de no llegar al mínimo de alumnos, Green Canal habilitará una lista de espera hasta que se completen las plazas.

Siendo el golf el deporte abanderado del Green Canal, estas instalaciones también acogen a un gran número de amantes del pádel y del fútbol 7. Por ello, un millar de personas reciben semanalmente clases de pádel, y también unos 500 niños y niñas aprenden a jugar a fútbol, de la mano de profesores.