Así se crea una estrella de rock viral
Trish Sie, directora y coreógrafa de videoclips, es capaz de convertir a una banda pop en un fenómeno en la Red
Hasta 2005, la banda pop de Chicago OK Go era uno de esos grupos alternativos que son demasiado convencionales para merecer el respeto de la crítica especializada y demasiado raros para ganarse el corazón del público masivo. Hasta que un día decidieron ponerse en manos de Trish Sie, coreógrafa y hermana del vocalista de la banda, para que les dirigiera el videoclip para su sencillo A million ways. Un plano fijo de la banda bailando una coreografía de Sie en el patio trasero de la casa de su hermano les convirtió en un fenómeno viral. Nueve millones de descargas. "Lo único que hice con la banda fue repicar los juegos que practicábamos con mi hermano hace 20 años, cuando nuestros padres nos llevaban de viaje y nos aburríamos tanto que nos encerrábamos en la habitación del hotel para grabarnos haciendo el burro. Los primeros vídeos que rodamos así fueron en Andalucía. Lo que hacemos ahora con la banda es exactamente lo mismo que entonces, pero con más gente y más dinero", comenta la coreógrafa y directora, que está en Barcelona para dar una conferencia con motivo del Broad.cat, evento alrededor del diseño audiovisual organizado por ADG y FAD.
"Los aficionados crean con calidad profesional, pero sin el alma 'amateur"
El éxito cosechado por los vídeos y coreografías creadas para OK Go han convertido a Trish Sie en objeto de deseo de otras bandas de rock, que contactan con ella con la esperanza de repetir el fenómeno, y para montones de marcas que han encontrado en su aproximación desenfadada y casera el santo grial de lo cool y barato. Ha trabajado para Levi's, Häagen Dazs o Google, para la que creó junto a OK Go un vídeo musical (All is not lost) para presentar el nuevo lenguaje informático HTML5, y ha concebido rutinas de baile para Rufus Wainwright o Miranda July. "Soy directora por accidente. Quería formar una banda, pero era muy mala. Luego quise ser escritora, pero no poseo la disciplina necesaria. Me dediqué al baile porque era algo que hacía sin esfuerzo, y a dirigir, porque, la verdad, me he dado cuenta de que mandar se me da muy bien", comenta Sie.
YouTube anda repleto de parodias caseras de sus vídeos y lo último que le apetece a Sie es convertirse en una de ellas. Mantener un estilo y una metodología ("gente que me gusta encerrada en una habitación durante un tiempo, solo necesito eso") sin pervertir la espontaneidad de su propuesta es su principal objetivo. "Lo más ridículo es que aún no se ha entendido que no puedes intentar embotellar la esencia de lo cool. Esa no se puede embotellar, y una vez está envasado y etiquetado deja de serlo. La marcas no lo comprenden y no hay forma de hacerles ver eso. Si de verdad quieren ser cool y hacer algo nuevo, la única solución es que se borren de la ecuación. Como los mecenas del Renacimiento. ¿Crees que el que ponía la pasta iba a Miguel Ángel y le decía 'ese dedo debe apuntar más al este?' Estoy cansada de gente que se acerca diciendo que quiere hacer algo nuevo y original, pero que sea igual que aquel vídeo de hace cinco años".
Una de las claves para entender el fenómeno Sie se halla en la manera con que su aproximación combina varios de los elementos indispensables para entender la forma en que nos divertimos en la era YouTube. Nos encanta bailar, nos chifla grabarnos en vídeo y sentimos una pasión desenfrenada por las cosas que parecen caseras y baratas, auténticas, en suma. De alguna manera, Sie se ha hecho profesional reivindicando lo amateur. Como no podía ser de otro modo, se siente cómoda en esa contradicción. "La clave es mantener la espontaneidad y el alma del amateur, aunque tengas los medios del profesional. El problema es que, en 2005, cuando empezamos a grabar, los medios que teníamos a nuestro alcance nos daban un rusultado que parecía siempre barato y casero. Hoy, cualquier amateur puede hacer algo que parezca profesional con su iPhone o lo que sea. Y ahí reside el problema: los aficionados crean productos que tiene la calidad del profesional, pero que no poseen el alma del amateur".
OK Go, los reyes de YouTube
Una de perros
- Tras este vídeo en el que se suman animales a la ecuación viral, la carrera de Sie entró en otra dimensión. Teclear White Knuckles.
A la carrera
- La rutina de baile sobre las cintas de correr ha sido el mayor éxito de esta asociación. Más de 50 millones de visitas en YouTube. Teclear Here It Goes Again.
El azar manda
- No es de Sie, pero ya es un clásico. OK Go ensayó durante seis meses. Dirigió James Frost la coreografía imposible. Teclear This Too Shall Pass.
El 'big bang'
- La primera colaboración entre Trish Sie y OK Go. El grupo se apropió de los movimientos de las boy bands.
Se puede ver en YouTube tecleando A Million Ways.
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