Rubalcaba pone la política de Rajoy ante el espejo del PP valenciano

El modelo de política que quiere aplicar Mariano Rajoy ya se ha ensayado en Valencia durante años con resultados regresivos en sanidad y educación, con grandes peajes a la corrupción y la manipulación de la opinión pública, una tasa de paro superior a la media y una deuda líder entre las autonomías. Ese fue el argumento del mitin central de los socialistas para las elecciones del 20 de noviembre, que se celebró ayer en un pabellón de la Font de Sant Lluís, en Valencia, lleno hasta la bandera, mientras no dejaba de llover sobre la ciudad. Eso permitió al líder del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, recriminar a la derecha las críticas al traslado del acto de la plaza de toros a un recinto cerrado de menor capacidad, en una decisión de los responsables de campaña que se reveló acertada.

"Los socialistas no somos iguales que ellos", aseguró Rodríguez-Piñero

El candidato del PSOE elogia a Alarte por usar el valenciano

Alarte presumió de que habían conseguido reunir a unas 10.000 personas. "Si el PP dice que sabe cómo arreglar lo del paro, yo pregunto a Rajoy ¿por qué aquí, donde gobiernan hace 16 años, tenemos más paro?", dijo el dirigente de los socialistas valencianos, que siguió en el escenario a la cabeza de lista por Valencia, Inmaculada Rodríguez-Piñero, y aseguró que el PP quiere convertir dos derechos básicos, como la sanidad y la educación, en "negocio para unos pocos".

Ni Rodríguez Piñero ni Alarte olvidaron citar a los candidatos de Castellón y Alicante, Joaquim Puig y Leire Pajín, ni al todavía presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. "Los socialistas no somos iguales que ellos", afirmó la candidata, que resumió el dilema que se plantea: solidaridad para que aporten más los que más tienen o "sálvese quien pueda". Rodríguez-Piñero recordó que Felipe González, sin duda la estrella de la convocatoria, fue quien dirigió el timón de la entrada de España en la Unión Europea y formuló una encendida defensa de la necesidad de "más Europa" frente a la crisis.

"No somos iguales", recogió el guante el candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, que cedió a gusto el protagonismo a González. Este levantó las mayores ovaciones con sus ironías sobre Rajoy y al denunciar "las mentiras" sobre los trasvases. También habló del corredor mediterráneo como una inversión que creará empleo. Ambos se refirieron a los casos de corrupción del PP valenciano

Alejo Stivel, antiguo componente de Tequila y autor de la sintonía de la campaña, actuó antes de un mitin en el que activistas prosaharauis, ya habituales, desplegaron una bandera, y alguien hizo lo propio con una pancarta contra el PP y el PSOE.El partido socialista ha pagado "un precio enorme", comentó Felipe González, por la agresividad de la política hídrica del PP, desde que Aznar opuso una "resistencia feroz" al plan hidrológico de su Gobierno. Según González, Aznar dijo entonces estar en contra "porque cuando el buen Dios decide que un sitio llueve y en otro no, no hay que contradecir la voluntad de Dios". Sin embargo, añadió González, "a Aznar le parecía bien que si a Dios se le ocurría que hubiera gas en Argelia, lo trajéramos con un gaseoducto". Después, en el Gobierno, el PP lanzó un plan hidrológico y convirtió en bandera el trasvase del Ebro cuando volvió a la oposición. Según el expresidente socialista, solo eran "mentiras". "Después de retrasarla cuatro años, como hace falta agua y es más sostenible y racional, ahora defienden la puesta en marcha de las desalinizadoras", concluyó.

Ni González ni Rubalcaba eludieron la polémica sobre la sanidad valenciana. Rubalcaba, que dijo que el Consell que preside Alberto Fabra "cierra hospitales y quita camas", puntualizó que al criticarla en el mitin del sábado en Dos Hermanas (Sevilla), no pretendía hablar mal de los valencianos ni de los trabajadores de la salud sino "de quien dirige el sistema sanitario". "¡Que no nos manipulen!", advirtió, para añadir que "el modelo de privatización de la sanidad valenciana acabará siendo una losa para la sanidad pública". Los populares, con todo, sostuvieron ayer el ataque a Rubalcaba y el candidato por Valencia Esteban González Pons reclamó que se disculpara ante los profesionales sanitarios.

También González se refirió al tema y confesó que, al oír al dirigente del PP andaluz Javier Arenas decir que quiere imitar el modelo valenciano, se preguntó: "¿No será que necesita un traje a medida?". No fue la única pulla por el caso Gürtel, que afecta al expresidente Francisco Camps, ya que Rubalcaba dijo que los valencianos han tenido un Gobierno que "de tanto buscar facturas de los trajes se olvidó de ayudar a los ciudadanos, se olvidó de Valencia". El candidato a la presidencia también criticó la "infección inmobiliaria" que se produjo en la Comunidad Valenciana.

Durante el mitin, Rubalcaba elogió que Alarte pronunciara un breve pasaje de su discurso en valenciano. "Aquí tenéis dos lenguas y eso es una gran riqueza", comentó.