El conflicto de la enseñanza pública
Mezquindad rezuma el actual conflicto de la enseñanza pública: te pongo dos horas lectivas más, cuarto y mitad de profesor te quito, dos euros te llevas por cada camiseta verde, 27 céntimos te descuento en la nómina de septiembre... Esto parece un sainete decimonónico.
Lo cierto es que se está produciendo una agresión sin precedentes a la enseñanza pública protagonizada por los responsables de cuidarla y defenderla. Por primera vez en mis 35 años de vida profesional, estoy luchando codo con codo junto a mis alumnos y los padres de mis alumnos por las auténticas mejoras en la calidad de la educación: reducción del número de alumnos por aula, desdobles en clases de idiomas, laboratorios y talleres, profesores de apoyo para alumnos con problemas de aprendizaje...
Estas propuestas y muchas más han dejado de ser entelequias o escozores de minorías concienciadas. La comunidad educativa ha comprendido que lo que está en juego es el modelo de sociedad: integrador, igualitario en oportunidades y justo; o por el contrario excluyente, elitista e injusto en origen. Para solucionar el conflicto se precisa la generosidad de todos, con crisis o sin crisis la educación es prioritaria. Nosotros ya estamos poniendo nuestra parte.