Bruselas quiere primar aspectos ecológicos en la nueva política agraria
La ministra Rosa Aguilar tilda la propuesta de "manifiesto desastre"
La Comisión Europea quiere edificar una nueva Política Agrícola Común (PAC). Para ello en la reforma en marcha que entrará en vigor en 2014, propone cambios sustanciales en los conceptos sobre los que se apoyaba hasta ahora una política que consume 60.000 millones de euros, el 40% del presupuesto de la Unión Europa. En la anterior reforma, el criterio básico con el que se repartían las ayudas directas a los agricultores era la producción histórica. En la propuesta actual, se introducen nuevos criterios que dan más peso a los aspectos medioambientales y límites en las ayudas directas hasta 300.000 euros por explotación. Esto supone una transformación importante que, de salir adelante como se presentó ayer en Bruselas, tendría dos damnificados: Francia y España, losque más dinero reciben ahora de la PAC.
El límite de ayuda por explotación se fija en 300.000 euros al año
Los cambios de 2002 ya trajeron un cambio sustancial de la PAC. Si hasta entonces el criterio básico era la producción directa, desde 2002 basta con que el agricultor demuestre, con datos de campañas pasadas, su capacidad de producción para percibir las ayudas. Ahora el comisario de Agricultura, Dacián Ciolos, propone una definición clara de quien es un "agricultor activo" y quien no. El objetivo es evitar que reciban ayudas directas -el 70% de los subsidios de la PAC- quienes no tienen en la agricultura su actividad principal. Al mismo tiempo, se reserva un 30% de las ayudas para quienen primen las buenas prácticas medioambientales.
La propuesta de la Comisión fue rechazada de plano por el Gobierno español. La ministra de Medio Ambiente española, Rosa Aguilar, criticó la propuesta de reforma que, a su parecer, necesita una "enmienda a la totalidad". Calificó de "manifiesto desastre" el concepto de agricultor activo esgrimido por la Comisión para diferenciar a aquellos más implicados con su explotación frente a los grandes terratenientes, actualmente los principales receptores de los subsidios.
La propuesta de la Comisión busca, precisamente, limitar el dinero que reciben estos últimos para destinarlo a proyectos de I+D en el medio rural. La Ministra considera que la propuesta no da respuesta a los desafíos a los que hace frente la agricultura europea y ha prometido que defenderá "con uñas y dientes" a los agricultores españoles.
En cuanto al reparto del dinero entre los estados miembros, la Comisión pretende avanzar hacia un único criterio basado en las hectáreas cultivadas. Hasta ahora, los países miembros antes de la ampliación a 27 gozaban de unos subsidios calculados en función de los que habían recibido los años anteriores. Esto suponía ventaja frente a los nuevos miembros, que los recibían en función de las hectáreas cultivadas en su territorio. Además, otro de los cambios que propone Ciolos es un límite anual de 300.000 euros para cada explotación agraria en pagos directos.
La voluntad del ejecutivo comunitario es que el dinero de la PAC, cuya propuesta de reforma a partir de 2014 se presentó ayer, se reparta de una forma más justa, tanto entre los Estados miembros como entre las explotaciones, a la vez que busca mejorar la sostenibilidad de la agricultura.
La propuesta también ha suscitado el rechazo de los productores denuncian que dejar un 7% de las explotaciones sin cultivar pone en peligro la seguridad alimentaria. También los grupos del Parlamento europeo, que por primera vez tendrá que dar su visto bueno a la nueva PAC, ya han dejado entrever el desacuerdo con cada uno de ellos los puntos presentados ayer que ven equivocados.
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