Griñán confía en que la UE dé luz verde a las ayudas transitorias

El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, confió ayer en que la Unión Europea (UE) saque adelante el sistema de ayudas transitorias para regiones que, como la andaluza, han dejado de cumplir los requisitos para recibir fondos comunitarios de cohesión.

Griñán afirmó que Andalucía ha avanzado en todos los terrenos desde la última reunión con Barroso hace unos meses, tras participar ayer en un almuerzo en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea (CE) y con otros presidentes autonómicos. En concreto, destacó la petición andaluza de crear un sistema transitorio para las regiones que dejan de ser de convergencia para pasar a considerarse de "competitividad", como es el caso de Andalucía, tras sobrepasar el límite del 75% de la renta media comunitaria.

El presidente de la CE comunicó a las regiones que este punto irá a la propuesta de presupuesto comunitario para el período 2014-2020, afirmó Griñán. El Gobierno andaluz también reclamó a Bruselas que las perspectivas financieras no fueran inferiores al 1% del PIB europeo. "Por lo que nos ha dicho el presidente Barroso, parece que tiene muchas posibilidades de que así sea", subrayó Griñán.

Política agrícola

En cuanto a la Política Agrícola Común (PAC), Andalucía propuso que se tuvieran en cuenta ayudas históricas como las que recibe esta región (unos 1.600 millones de euros al año en pagos directos), y que éstas estuvieran condicionadas a cumplir requisitos de seguridad alimentaria, conservación del medio ambiente, lucha contra el cambio climático y desarrollo rural.

"Todos estos puntos siguen en la propuesta de la Comisión", destacó Griñán. "Ahora se trata de que en el Consejo Europeo asuman estas posiciones y las defiendan", concluyó el presidente andaluz. Según Griñán, "los Estados son siempre los que responden ante la UE del cumplimiento del pacto de estabilidad y crecimiento, no las regiones" y recordó la reciente modificación de la Constitución española para garantizar el cumplimiento de dicho pacto.

En la reunión con Barroso, el Gobierno andaluz ha mostrado su compromiso con la consolidación fiscal, pero también ha querido dejar claro que el problema sigue siendo financiero.