Un plan de pago pone fin a la huelga de la ayuda a domicilio de Jaén

Los más de 700 dependientes de la capital jiennense recibirán de nuevo el próximo lunes el servicio de ayuda a domicilio que se dejó de prestar el pasado lunes por la huelga de las 250 trabajadoras de la firma concesionaria, Macrosad. La plantilla desconvocó ayer el paro indefinido tras alcanzarse un acuerdo en la reunión mantenida con la empresa, con el alcalde, José Enrique Fernández de Moya, y con la consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro. Las trabajadoras aceptaron el calendario de pago propuesto por el alcalde jiennense, con el que podrán empezar a percibir el dinero de las cuatro nóminas que se les adeuda.

El plan de pago comprometido por Fernández de Moya prevé el abono de 1,2 millones de euros hasta el próximo diciembre, desglosado en tres pagos en octubre (600.000 euros), noviembre (250.000) y diciembre (350.000). Con ese dinero se salda más de un tercio de la deuda que el Ayuntamiento mantiene con Macrosad (tres millones de euros, de los que 2,2 se acumularon en el anterior mandato municipal), con el que se podrá saldar la deuda a las trabajadoras.

Macrosad tendrá una cuenta restringida para que no se desvíe el dinero

Pero más allá de la cantidad anunciada, la plantilla de Macrosad valoró especialmente el compromiso municipal de crear una cuenta restringida que garantice que todo el dinero recibido por la Junta, que subvenciona al 100% el servicio de ayuda a domicilio, se destinará "en exclusiva" al pago de los salarios. De este modo, tanto las trabajadoras como la empresa quieren evitar el desvío de fondos realizado en los últimos años por el Consistorio bajo el pretexto del principio de caja única. Al acuerdo también contribuyó la mediación de Navarro, que garantizó que su departamento abonará puntualmente las subvenciones.

Pero el acuerdo alcanzado para poner fin a la huelga en el servicio de ayuda a domicilio no evitó la bronca política durante el pleno ordinario que ayer celebró el Consistorio. La concejal de Asuntos Sociales, Reyes Chamorro, acusó al anterior gobierno, de PSOE e IU, de haber desviado las partidas de la Junta para otros gastos, algo que fue desmentido por la edil socialista Dolores Herrera. "Las trabajadoras nunca tardaron más de un mes en cobrar", dijo Herrera, tras destacar que el servicio creció un 500% durante su mandato. La edil de IU Isabel Mateos censuró al alcalde por haber anunciado su intención de rescindir el contrato con Macrosad. "¿Hubiera hecho usted igual con FCC o con la empresa de autobuses Castillo?", se preguntó la concejal, en alusión a otras concesiones con las que también mantiene deudas el Ayuntamiento.

La oposición municipal criticó con dureza la decisión del gobierno municipal del PP de modificar el convenio para la prestación del servicio de ayuda a domicilio. La intención es que los nuevos usuarios (hay 85 en lista de espera) puedan tener la opción de contratar el servicio por su cuenta y luego recibir la subvención de la Junta.