El marisqueo vuelve a estar permitido en la ría do Burgo

La ría coruñesa de O Burgo sigue siendo de las más castigadas de Galicia. Pero al fin, tras cinco años de veda por contaminación de fecales, volverá a ser posible extraer marisco para su consumo en fresco en su cara más externa. Ni el vertido de 33.000 litros de queroseno que sufrió el día 2, ni la marea roja por tóxina que padecía en las últimas semanas dejaron finalmente huella, según anunció ayer la Consellería do Mar. Esta levantó anoche el doble cierre cautelar que pesaba sobre parte de O Burgo.

Los 134 mariscadores censados en la Cofradía de A Coruña podrán al fin volver a faenar, aunque solo en aguas más próximas al océano tras permanecer cinco años, desde diciembre de 2006, en paro forzoso, cuando se declaró la ría zona C y prohibida la extracción de moluscos para su consumo en fresco. Los 44 profesionales a flote, que trabajan en 38 embarcaciones autorizadas, podrán retomar sus actividades de inmediato mientras que las 90 mariscadoras de a pie iniciarán la campaña extractiva el próximo lunes, día 26.

Los controles que realizó el Instituto Tecnolóxico do Mar (Intecmar) con muestras de agua recogidas días después del sabotaje que vertió al mar 33.000 litros de queroseno "reflejan total normalidad".Según el departamento que dirige Rosa Quintana, "no existe afectación sobre el molusco". Los niveles de hidrocarburos en la ría coruñesa son los habituales, inferiores a "los legalmente establecidos por la Unión Europea", añade la consellería. E insiste en "el rigor" con el que se realizaron los análisis y en garantizar "que no hay ningún tipo de riesgo".

Los últimos controles sobre la presencia de toxina lipofílica, una marea roja que afecta los moluscos y desaparece de forma natural, demostraron anoche que tampoco existe ya en O Burgo esa concentración que obligó a reforzar el cierre de la ría hace diez días. El cierre en aguas de la zona vecina de Baldaio por la misma biotoxina también se levantó anoche. Por el contrario, en Ferrol sigue totalmente vigente la prohibición tajante de extraer vieira por continuar altos los niveles de toxina ASP (paralizante) en las aguas.

La noticia de la reapertura parcial de la ría de O Burgo llegó cuando terminaba una reunión convocada por la Cofradía de A Coruña con todas las autoridades e instituciones para tratar de aclarar las medidas en marcha para poner fin a la fuerte y continuada contaminación que sufre desde hace años la zona. La Consellería de Medio Ambiente convocó para el sábado a alcaldes y a la cofradía para informarles de su plan de saneamiento para esta ría, que espera que se concluya en 2015.