Santiago cierra un vertedero que era ilegal desde hace cinco años
El Ayuntamiento de Santiago declaró ayer el cierre por sorpresa de un vertedero de inertes localizado en la parroquia de Aríns y que lleva 16 años abierto. Mediante un decreto del alcalde, el popular Gerardo Conde Roa, el gobierno local tilda de ilegal el depósito de residuos, que no cuenta con las licencias necesarias para desarrollar esta actividad.
Los informes de técnicos medioambientales, que también se incluyen en el documento, denuncian que el depósito de residuos incumplía la normativa ambiental marcada por la Unión Europea, e incurría en graves irregularidades.
El vertedero de Aríns, que recibía residuos de construcción y enseres sólidos de Santiago y alrededores, se abrió en 1995 con titularidad municipal. En 2005, el Ayuntamiento compostelano cedió la gestión a la empresa Vertresa, filial de Urbaser, del grupo ACS. Agotada la licencia en 2006, siguió funcionando sin que las autoridades hiciesen nada al respecto.
