_
_
_
_

El queroseno comienza a llegar a la parte externa de la ría de O Burgo

El grueso del vertido permanece acotado aguas arriba del puente romano

Por tierra y por mar continúa durante todo el fin de semana el dispositivo de limpieza y vigilancia desplegado en la ría coruñesa de O Burgo por el vertido de unos 33.000 litros de queroseno, que obligó el viernes por la mañana a vedar la extracción de marisco apenas tres horas después de que se abriera. Dos embarcaciones de la Consellería do Mar y efectivos de Gardacostas y de Protección Civil de Cambre, Oleiros y A Coruña se encargan de acotar la deriva de las manchas de hidrocarburo para impedir que se expandan. Y, sobre todo, de limitar las filtraciones en la zona de la ría donde tenía que haber comenzado el viernes la primera campaña marisquera en cinco años.

El grueso del vertido, fruto de un sabotaje a un camión-cisterna aparcado en un área de descanso de la Autopista del Atlántico (AP-9), de momento se mantiene más o menos acotado aguas arriba del puente romano de O Burgo, en la lengua final de la ría coruñesa. Las barreras flotantes de contención, que los miembros de Protección Civil van cambiando y limpiando después de cada marea, están ayudando a frenar la expansión del derrame. Pero las manchas de hidrocarburo han empezado ya a llegar a la parte externa de la ría, la que estaba hasta ahora menos contaminada y donde volvía a ser posible mariscar. Efectivos de protección Civil de A Coruña se pasaron ayer el día colocando mantas absorbentes "en aquellos puntos donde se puede observar una mayor concentración de queroseno", informó el Ayuntamiento de la capital provincial.

Temor a que las lluvias arrastren el combustible que se derramó en tierra

Según explicó el responsable de Gardacosta de la Xunta de Galicia, Lino Sexto, había ayer cierta preocupación por las consecuencias que podrían acarrear las lluvias previstas anoche, dado que, de ser de cierta intensidad, podrían arrastrar hasta la ría coruñesa el queroseno que se derramó en tierra y quedó adherido a la maleza.

Este carburante, destinado a abastecer a los aviones del cercano aeropuerto de Alvedro, no es del todo volátil, flota en el agua y es muy tóxico para las especies marinas. Tardarán con mínimo una semana los resultados de los análisis que haga la Consellería do Mar para determinar cómo afectó este considerable vertido de hidrocarburo al marisco. Nadie es capaz de saber si la cara externa de la ría podrá, como estaba previsto, volver a abrirse al marisqueo por primera vez desde su cierre en diciembre de 2006 a causa de la fuerte contaminación por fecales de las aguas.

De momento, no llegó rastro de queroseno a los arenales donde el 26 de septiembre estaba previsto iniciar la primera extracción en cinco años de berberechos y almejas aptas para su consumo en fresco. El Ayuntamiento de A Coruña mantiene el dispositivo de vigilancia, y "también por prudencia sigue ondeando la bandera amarilla en las playas de Oza y Santa Cristina", las más cercanas al derrame.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Los interrogantes también centran las investigaciones para descubrir la autoría y los motivos de este vertido, de cuya intencionalidad no caben dudas. Aún no hay resultados en las pesquisas para identificar al hombre que las cámaras de seguridad de la autopista captaron manipulando las válvulas del camión-cisterna. Fue un sabotaje, aunque se desconoce el porqué de que se vertieran los 36.500 litros de queroseno -alrededor de 4.000 fueron recuperados antes de llegar al mar- a la ría, justo el día en que se abría la veda por primera vez en cinco años.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_