Más de 7.000 personas exigen en la calle un referéndum

Alrededor de 3.000 personas en Madrid y otras 2.000 en Barcelona se manifestaron ayer en la calle en contra de la reforma constitucional pactada por PSOE y PP y para exigir un referéndum que permita expresarse a la ciudadanía. Fueron las más multitudinarias de una cadena de movilizaciones convocadas por el Movimiento 15-M por toda España: Cádiz (400 indignados), Valencia (unos 300), Vigo (300), San Sebastián (200), Málaga (cerca de 200), Granada (un centenar), Santiago (100), Pontevedra (100), Logroño (más de 100), Jaén (un centenar), Tenerife (más de 100), Bilbao (unos 50), Almería (50) y Vitoria (20).

En Madrid, la marcha, convocada por Democracia Real Ya y Juventud Sin futuro, además de otros colectivos afines al 15-M, arrancó en Atocha y terminó en la simbólica Puerta del Sol. En la cabecera, una gran pancarta proclamaba: "El pueblo también cuenta. Referéndum ya". A su término, muchos de los manifestantes se concentraron en una asamblea para debatir las siguientes medidas de presión con el objetivo de que se convoque un referéndum sobre la reforma constitucional.

"Se espera un otoño cargado de movilizaciones", aseguró Fabio Gándara, de Democracia Real Ya. La de ayer no tenía permiso de la Delegación del Gobierno. Gándara explicó que habían decidido convocarla de todos modos como respuesta exprés a una reforma exprés de la Constitución, que se va a llevar a cabo "sin debate, sin informar a los ciudadanos y sin someterse a consulta popular".

Paquita López, de 71 años, argumentaba, envuelta en una bandera republicana: "Esta reforma constitucional es un desastre, pedimos un referéndum". "Si tu enemigo político aplaude tus decisiones, algo mal habrás hecho", añadía.

"Un golpe de Estado"

Al grito de "¡Queremos un referéndum!", 2.000 personas se manifestaron en Barcelona. La marcha, bajo el lema ¿Cómo les explicarás a tus hijos que perdiste lo que ganaron tus padres?, arrancó a las siete de la tarde en la plaza de Cataluña y se dirigió a la sede del Parlamento catalán, en el parque de la Ciudadela, donde se celebró una asamblea popular, informa Laia Reventós.

Los manifestantes, mayoritariamente jóvenes pero también personas de mediana edad, corearon todo tipo de consignas contra la clase política, los banqueros y los recortes en sanidad y educación. Y exigieron que se someta a votación popular la reforma de la Constitución, que consideran "un golpe de Estado".