Pillsbury, as fugaz (II)
Blancas: H. Pillsbury (EEUU).
Negras: G. Marco (Austria).
Defensa Ortodoxa (D55). París, 1900.
Harry Nelson Pillsbury (1872-1906) fue uno de los mayores talentos que ha dado el ajedrez en toda su larga historia; no aprendió a jugar hasta los 16 años -y a los 18 ya era famoso por sus grandes éxitos- pero, por desgracia, murió con sólo 34, de sífilis. Una confusión del arriba firmante evitó que le dedicásemos en veranos anteriores la serie de joyas que publicamos esta semana. Particularmente prodigiosa era su capacidad para jugar a ciegas contra más de veinte adversarios. Antes de una exhibición le leyeron una lista de 30 palabras que empezaba así: Antiphlogistine, periosteum, takadiastase, plasmon, ambrosia, Threlkeld .... Varias horas después, la recitó sin un solo error. También impresionante era su eficacia en el ataque, de la que ayer vimos una bella muestra. Esta, que produjo ya enfermo, es aún más espectacular: 1 d4 d5 2 c4 e6 3 Cc3 Cf6 4 Ag5 Ae7 5 e3 0-0 6 Cf3 b6 7 Ad3 Ab7 8 cxd5 exd5 9 Ce5 Cbd7 10 f4 c5 11 0-0 c4? (esta y otras partidas de Pillsbury indican que cerrar el centro acelera el ataque blanco) 12 Ac2 a6 13 Df3 b5 14 Dh3 g6 (como en la partida de ayer, Pillsbury ha montado su maquinaria infernal, y será implacable en la ejecución) 15 f5! b4 16 fxg6! hxg6 (si 16 ..bxc3? 17 Txf6 Cxf6 18 Axf6, y mate) 17 Dh4! (lo más elegante, aunque también se gana con 17 Cxd7 Cxd7 18 Axg6! fxg6 19 De6+, ganando) 17 ..bxc3 18 Cxd7 Dxd7 19 Txf6! a5 20 Taf1 Ta6 (diagrama) (es el momento de poner una preciosa guinda) 21 Axg6!! fxg6 22 Txf8+ Axf8 23 Txf8+! Rxf8 24 Dh8+ Rf7 25 Dh7+ Rf8 26 Dxd7, y Marco se rindió. Correspondencia: ajedrez@elpais.es
Vea la partida |
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.