Ros y Bustos pactan para cerrar el debate sobre el grupo propio del PSC

Los socialistas catalanes dieron ayer un paso adelante para enterrar la eterna polémica con el PSOE a propósito del grupo parlamentario propio en el Congreso. El alcalde de Sabadell, Manuel Bustos, y el de Lleida, Àngel Ros, firmaron una enmienda conjunta, que debatirán las agrupaciones del partido, en la que se prevé que los diputados del PSC puedan desmarcarse de los del PSOE en una votación en las Cortes. Sería "en casos excepcionales relativos a temas de especial interés para Cataluña y su autogobierno", dice la enmienda, y siempre que no hubiera acuerdo en una comisión paritaria de seguimiento "para los temas catalanes en el Congreso" que deberá crearse.

La enmienda fue comunicada al primer secretario del PSC, José Montilla, antes de reunirse la ejecutiva, en la que no se debatió la iniciativa. Sin embargo, el portavoz del partido, Miquel Iceta, desveló el acuerdo de Bustos y Ros, sin dar más detalles y argumentando que desconocía su contenido.

Nou Cicle reprocha al alcalde de Lleida que "se preste" a pactar con Bustos

Bustos es presidente de la Federación de Municipios de Cataluña y vicepresidente del Comité Federal del PSOE, y representa el alma españolista del PSC, cuyor orígenes se remontan a la Federación Catalana del PSOE, uno de los tres grupos a partir de los cuales se creó el PSC en 1978. Ros simboliza algunos de los sectores más catalanistas, que desde hace años reclaman un perfil propio del PSC, y ha adquirido un gran protagonismo en los últimos meses, desde que se da por hecho que aspira a suceder a Montilla.

Nou Cicle insistirá

Y es que la disciplina de voto con la que han actuado los socialistas catalanes en el Congreso ha sido empleada desde que hay democracia por CiU y otros partidos catalanes como arma arrojadiza para acusar a los diputados del PSC de "sucursalistas" y de hacer seguidismo del PSOE, por votar diferente en Cataluña que en Madrid. El último episodio se produjo con motivo de la reclamación al Gobierno del pago de fondo de competitividad.

La enmienda pactada ayer no cerrará, sin embargo, el debate. La corriente Nou Cicle anunció que seguirá reclamando grupo parlamentario propio. El texto de Bustos y Ros propone que el Grupo Socialista en el Congreso se transforme en Grupo Parlamentario Federal del PSOE, en aplicación de los estatutos, y que se revise el Protocolo de Unidad Socialista de 1978, que desde entonces ha guiado la relación "fraternal y federal" de ambos partidos.

El pacto de Bustos y Ros fue recibido de manera desigual por los diversos sectores del PSC. Así, el primer secretario del PSC de Lleida y exconsejero de la Generalitat, Joaquim Llena, reclamó que los socialistas celebren su congreso sin temor al debate. "Yo creo que es un congreso suficientemente complicado como para no llegar con muchas cosas precocinadas; la gente quiere decidir allí y en aquel momento", declaró Llena.

El diputado autonómico del PSC Joan Ferran se sumó a la crítica a ese pacto Bustos-Ros en términos parecidos. "Reivindico la discusión colectiva producida desde la base. No me gusta tener la sensación de que otros hacen o pretenden hacer las cosas por mí. Una cosa es un aperitivo congresual y otra muy diferente un plato precocinado destinado a recalentar", escribió Ferran en su blog.

Por su parte, la corriente Nou Cicle restó importancia al pacto. "Solo es un punto de partida. El mismo Àngel Ros firmará en los próximos días otras enmiendas, pero lo que se sorprende es que se preste a pactar con Bustos", explicaron fuentes de Nou Cicle. Y es que el alcalde de Sabadell ha comentado en alguna ocasión en privado que aceptaría que el PSC tuviera grupo propio en el Congreso si el PSOE lo tuviera en el Parlament.

Por su parte, la vicepresidenta primera del Congreso, Teresa Cunillera, se felicitó del pacto. "Me alegro porque nosotros, en nuestro proceso de unidad con el PSOE, ya establecimos un sistema incluso de acuerdo a la hora de hacer el sentido del voto", declaró a Europa Press. "¿Cómo no me va a alegrar que se pongan de acuerdo para avanzar en una discusión de una cosa que, por cierto, está bastante elaborada?", añadió.

La enmienda también propone de manera escueta que se avance en el Senado para hacer de este "la verdadera Cámara territorial".