Las pérdidas por la 'crisis del pepino' se elevan a 55 millones

Los productores y comercializadores de frutas y hortalizas de Andalucía han perdido 55,46 millones de euros por la crisis del pepino, causada por Alemania al activar, el 24 de mayo, la alerta sanitaria y relacionar erróneamente una partida de hortalizas almeriense con las intoxicaciones por la bacteria E.coli. La acusación, que se ha demostrado que es falsa, llevó a varios países a dejar de comercializar frutas y hortalizas procedentes de España.

Andalucía es la comunidad más castigada y acapara el 75% de los 71 millones de pérdidas registradas en toda España por la falsa alarma.

Los 55,46 millones se han calculado en función de los daños producidos tanto por la cosecha en verde como por la retirada y destrucción de los cinco productos recogidos en la resolución europea sobre indemnizaciones: pepino, calabacín, lechuga, tomate y pimiento.

La ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, mantuvo ayer en Almería un encuentro con el sector hortofrutícola, el mismo día en el que se dio por finalizado el recuento de los expedientes de solicitud de ayudas.

Rosa Aguilar, que asistirá hoy en Bruselas a la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura, adelantó que pedirá que, entre los productos por los que se puede pedir compensación, se incluyan la sandía, el melón y la fruta de hueso. También pedirá una indemnización para los productores que sufrieron pérdidas con anterioridad a la publicación de la resolución europea de 11 de junio. "No había reglamento entonces, pero esa partida no la vamos a dar por perdida", se comprometió.

"Nos señalaron con el dedo indebida e injustificadamente y hemos tenido que dar respuesta a esa denuncia", se molestó Aguilar, quien también reclamará la "modificación" de la red de alertas sanitarias de la UE, la creación de unos "mecanismos rápidos" para dar respuesta inmediata ante casos como el ocurrido contra la agricultura española y una campaña de promoción de los productos hortofrutícolas españoles que no cueste "ni un euro" a los agricultores.

La crisis del pepino provocó el despido de centenares de personas y las organizaciones agrarias se muestran aún temerosas ante el inicio de campaña, ya que la confianza en el consumidor y en los mercados aún no se ha recuperado.

Es "imprescindible" conocer el origen del brote de E.coli "para quedar exculpados y limpios", señaló el secretario general de COAG, Miguel López. El presidente de Hortalizas de Asaja, Francisco Vargas, pidió una "verdadera normativa" que se active ante situaciones de crisis, mientras el secretario federal de la UPA, Marcos Alarcón, calificó de "insuficiente e incapaz" el sistema de alerta sanitaria.