El Loco no se pone límites

El nuevo entrenador del Athletic, Marcelo Bielsa, se ganó ayer a la afición rojiblanca y a los medios de comunicación a base de inesperados gestos durante su primer entrenamiento en Lezama y de ingeniosas respuestas en la multitudinaria rueda de prensa posterior, a la que asistieron medios chilenos, argentinos e italianos. Así, por ejemplo, el técnico argentino no dudó en llevar a uno de los niños que siguieron la sesión -asistieron más de 2.000 aficionados-, a visitar las instalaciones del club. Bielsa, que pese al retraso de varias horas que sufrió para aterrizar en el aeropuerto de Loiu por culpa de la ceniza provocada por la erupción del volcán chileno Puyehu, no dejó de sonreír y bromear, señaló que afronta su nueva etapa como entrenador con "gratitud" y "responsabilidad".

El Loco, detalló que uno de los aspectos que le convenció para aceptar la oferta del presidente del Athletic, Josu Urrutia, fue la similitud entre el equipo y el Newell's Old Boys, club a que dirigió entre 1990 y 1992 y del que ha recordado que en aquella época tenía en común con la entidad rojiblanca que se nutría de jugadores formados en su cantera. "El sentido de pertenencia es lindo para un entrenador, porque crea una zona genuina de estímulo verdadero, más allá del dinero y el reconocimiento. Su sentido romántico y señorial que me resultaron atractivas". A la hora de definir el estilo que pretende implantar en el Athletic el técnico detalló que prefiere "el protagonismo a la especulación, el campo rival al propio, la posesión de balón a la recuperación, la participación de todas las líneas de juego y el reglamento como un recurso para mejorar el juego en vez de para tratar de obtener ventaja".

En lo que respecta a objetivos, el entrenador argentino dejó claro que "antes de empezar no nos ponemos límite. Después habrá que tomar conciencia, pero la ilusión es un lugar insustituible para los entrenadores". "Lo que pasó antes nos siempre autoriza a imaginar el futuro, para bien o para mal. Haber acabado sextos no quiere decir que no podamos acabar octavos ni quiere decir que no podamos acabar terceros", aseveró.