El Tribunal Superior admite que el juicio del 'Prestige' "está varado"

Suena casi irónico. El juicio por la catástrofe del Prestige, la mayor causa jamás instruida en España por un delito contra el medioambiente, sigue sin fecha. Las autoridades judiciales ni siquiera son capaces de garantizar que el próximo año, cuando se cumplan en noviembre los diez años de la enorme marea negra que tiñó de fuel la costa desde Francia hasta la desembocadura del Miño en Portugal, se juzgará este caso. "Es imposible saberlo, está varado coyunturalmente, a la espera del cumplimiento de determinadas actuaciones", admitió ayer el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), Miguel Ángel Cadenas.

A nivel judicial encalló un caso cuyo meollo está precisamente en resolver todo lo contrario: determinar si la catástrofe fue provocada por alejar de la costa en pleno temporal el vetusto petrolero, tras romper su casco, es una de las grandes cuestiones que habrá de resolver el macrojuicio que se celebrará algún día en la Audiencia Provincial de A Coruña. En el banquillo de los acusados están llamados a sentarse cuatro personas: el entonces director general de Marina Mercante, José Luis López Sors, el anciano capitán del barco, Apostolos Mangouras, así como otros dos mandos del buque que llevaban desde la catástrofe en 2003 en paradero desconocido.

No habrá vista antes del décimo aniversario de la catástrofe

La inesperada localización hace escasas semanas, en su domicilio habitual en Grecia, del jefe de máquinas Nikolaos Argyropoulos ha contribuido a retrasar una vez más el esperado juicio en el que son demandantes como afectados cientos de personas y entidades, además de los estados español y francés. Comisiones rogatorias "por trámites de responsabilidades civiles" a Grecia, país del armador del Prestige, y Gran Bretaña, donde está su aseguradora, son otras de las razones de la enésima demora de este juicio. "En el mejor de los casos" podría celebrarse en 2012, dijo Cadenas. Aunque el presidente del TSXG apuntó que tampoco quiere hacer más "augurios".

La catástrofe del Prestige es uno más de las decenas de miles de casos pendientes que arrastra la Justicia en Galicia. En la presentación, ayer, de la memoria judicial, Miguel Ángel Cadenas insistió en la dificultad de "eliminar la bolsa de retraso" que padecen los órganos judiciales de manera casi endémica. Y si en el año 2009 la crisis colapsó los juzgados de lo Mercantil por los concursos de acreedores -las antiguas suspensiones de pagos-, ahora son los despidos los que atascan, por "la gran cantidad de entradas" de nuevos casos, las salas de lo Social.

Pero también se dispararon los contenciosos-administrativos (en un 20%) y en el ámbito penal "hay una tendencia imparable al alza del número de asuntos". Al finalizar 2010, quedan pendientes, sin resolver, 20.012 en los juzgados de lo Penal.