La patronal afianza su autonomía con la elección de González

El promotor y constructor Rafael Ferrando pasó ayer el testigo al industrial José Vicente González al frente de la patronal autonómica Cierval. La elección de González abre una nueva etapa, en la que la organización reforzará su autonomía frente a los poderes públicos, entre ellos el Gobierno valenciano, con el que Cierval ha sido tradicionalmente condescendiente. "Nosotros representamos a las empresas, a los empresarios, de ellos y solo de ellos debemos ser dependientes", dijo González en su primera intervención ya como presidente. Eso sí, brindó la colaboración de la organización con los Gobiernos, "ya sean locales, autonómicos o nacionales". Este industrial, propietario de una multinacional, que no solo defiende en los discursos la innovación sino que lo ha puesto en práctica en su empresa hace décadas, y con fama de combativo, anunció que sus metas este mandato serán la unidad, la independencia, la transparencia y la eficacia.

Poco antes, Ferrando, que deja la presidencia después de 12 años en el cargo, recordó que deja una patronal autonómica más consolidada, en la que los recelos de las organizaciones provinciales están superados, y con voz y peso propio en los órganos de gobierno de la CEOE. Él mismo confesó, en su intervención, que cuando hace unos meses González le expresó su deseo de presentarse como candidato a la presidencia de Cierval, decidió no presentarse a la reelección. "Os dejo la patronal fuerte, representativa y eficaz que os prometí cuando me disteis vuestra confianza", subrayó. Ferrando llegó a Cierval en 1999, con el auge del sector de la construcción, y se marcha con el negocio en sus horas más bajas.

Dirigentes empresariales de Murcia y Aragón arroparon a José Vicente González el día de su elección. También dirigentes de la CEOE. José María Lacasa, secretario general de la gran patronal española, se mostró convencido de que "la colaboración con Cierval será fuerte y muy representativa". González compatibilizará durante unos meses su nuevo cargo con el de presidente de la patronal provincial de Valencia.

Con los datos en la mano, el nuevo presidente esbozó un escenario nada halagüeño de la economía española y valenciana, en particular. Destacó que tenemos una renta per cápita por debajo de la media española y una tasa de paro por encima. El único dato que sale bien parado es la tasa de cobertura de las exportaciones, como ha sido tradicional durante décadas.

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González defendió, a pesar del ambiente de crisis, la necesidad de elevar la renta por habitante tres puntos por año durante los próximos cuatro, y equiparar el PIB valenciano al español. "Sólo así conseguiremos", enfatizó el empresario, "reducir el paro por debajo de la media".

Si hubo un hilo conductor en la intervención con la que González se estrenó en el cargo fue la necesidad de más eficiencia, tanto en el seno de la patronal, como en las Administraciones Públicas y organizaciones sociales. Sin paños calientes, el empresario insistió en que hay que acelerar los esfuerzos para adaptarse las estructuras a una nueva situación económica y financiera. "Hay que hacer más con menos", dijo rotundo. De puertas adentro abogó por mejorar los procesos de colaboración entre las patronales provinciales y la autonómica para no duplicar esfuerzos y racionalizar el gasto. Y si es precisó habrá fusiones. No es la primera vez que González habla de "colaboración intensa" con las cámaras de comercio, por ejemplo.

Además, reclamó que la reforma del sistema de pensiones se ratifique en el Parlamento, que se acelere la reestructuración de las cajas de ahorros, que se reduzcan las cotizaciones a la Seguridad Social para reducir los costes laborales no salariales, y que se modifiquen el impuesto del IVA o los especiales. También defendió la llegada del AVE a Alicante, un corredor mediterráneo para mercancías completo y una conexión "decente" entre Sagunto y Zaragoza.

"Hemos de hacer que el conjunto de la sociedad comparta la cultura del esfuerzo, que para conseguir algo hay que trabajar y trabajar duro", manifestó. Para advertir de la importancia de aumentar la productividad, González adaptó una célebre frase del presidente Kennedy a su discurso: "No se trata de preguntarse qué puede hacer mi Comunidad por mí, sino que puedo hacer yo por mi Comunidad".

González reclamó liderazgos fuertes y respetados por la sociedad para llevar adelante estas reformas culturales. "Que sean capaces de explicar lo que hay que hacer y por qué, con pedagogía y sin miedo a ser molestos o duros con la población", subrayó. En este sentido, pidió a las Administraciones Públicas austeridad, pero también rigor y eficacia. "También a las Administraciones les corresponde hacer más con menos", reiteró. Y recomendó a la Generalitat centralizar las compras, pagar en plazo a los proveedores, reducir precios y disminuir el absentismo en la sanidad. "El sector público debe hacer un cambio de gran calado en la forma en que se relaciona con la actividad productiva", agregó. González cerró su discurso adaptando los versos de una canción de Raimon al ámbito empresarial: "Hem de treballar junts, com més millor, si no volem perdre-ho tot".

Al acto no acudió ningún representante político. Estos fueron invitados al almuerzo posterior. Allí estuvieron la vicepresidenta Paula Sánchez de León, los tres consejeros del área económica y los portavoces parlamentarios en las Cortes. Jorge Alarte, portavoz socialista, felicitó al nuevo presidente y le ofreció la colaboración de su partido.