La soltería le cuesta a Mel Gibson 625 millones

Mel Gibson y Robyn Gibson, la que fue su esposa durante 28 años, han llegado a un acuerdo de divorcio, según anunciaron ayer sus abogados. Tras dos años de negociaciones, el actor pagará 900 millones de dólares (más de 625 millones de euros) a su exesposa por la liquidación de sus bienes. Cuando se casó, la pareja no firmó ningún contrato prematrimonial. Este es uno de los divorcios más caros de Hollywood, solo comparable, de momento, a los más de 200 millones pagados por el golfista Tiger Woods.

Robyn solicitó el divorcio en 2009 después de 28 años de matrimonio, argumentando diferencias irreconciliables. La pareja se separó días después de que el actor fuera detenido conduciendo ebrio y poco después de que lanzara una diatriba antisemita. Tienen siete hijos juntos.

Gibson, de 55 años, fue una de las estrellas más rentables de Hollywood, ganador de dos oscars a la mejor película y a la mejor dirección por Braveheart, que él mismo protagonizaba.

Tras su separación, el actor inició una relación con la pianista y compositora rusa Oksana Grigorieva. Sin embargo, la pareja rompió el año pasado tras varias denuncias y con un juicio de por medio -celebrado el pasado mes de marzo- en el que fue condenado a tres años de libertad condicional, así como a seguir un tratamiento psicológico para combatir sus accesos de ira y a seis horas de servicio comunitario con la organización Mending Kids. Junto a Grigorieva tuvo una niña, Lucia, que cumplirá dos años el próximo noviembre.

La abogada de Robyn ha sido Laura Wasser, una experta en separaciones de famosos que ha tramitado, entre otros, los divorcios de estrellas como Angelina Jolie, Britney Spears y Stevie Wonder.