Ocho artistas buscan el estigma del sida en la Fundación Miró

La reproducción del Fauno Barberini, obra maestra del arte helénico, restaurada por Bernini, que incidió en la desfachatez de la postura y en su carácter homoerótico, surge majestuosa de la penumbra. Un gran rótulo de neón, al estilo de los teatros de variedades, con el lema AIDS is good business for some (el sida es un buen negocio para algunos), ilumina el fauno durmiente y su brazo musculado, que está recibiendo una transfusión de sangre. New blood, de Elmgreen & Dragset, es una de las piezas visualmente más impactantes de You are not alone, la exposición organizada por la Fundación ArtAids, que se inaugura el jueves en la Fundación Miró, en conmemoración de los 30 años del descubrimiento del virus VIH, y que podrá verse hasta el 8 de septiembre.

"No es solo la enfermedad lo que asusta, sino el rechazo, la exclusión y el estigma que conlleva. Lo peor es el miedo a la soledad", asegura el coleccionista holandés afincado en Barcelona, Han Nefkens, fundador de ArtAids, quien supo que era portador del virus en 1987 y, tras un doloroso proceso que relata en el libro Tiempo prestado, decidió combatir la enfermedad a través del arte. A diferencia de la mayoría de coleccionistas, su sueño no es abrir un centro propio para albergar la colección que está formando, produciendo obras que se enfrentan desde diferentes perspectivas y medios a las problemáticas vinculadas al sida. "Prefiero trabajar con otras instituciones y crear proyectos compartidos", asegura.

La comisaria de la exposición, Hilde Teerlinck, directora del centro de arte francés Frac Nord-Pas de Calais y colaboradora habitual de Nefkens, con quien ha producido unas 130 obras relacionadas con el sida, ha encargado ocho obras a artistas que no trabajan habitualmente con este tema. Una de las que se estrenan en You are not alone, la de Matthew Darbyshire, indaga precisamente sobre el origen del estigma, a través de un simulacro de punto de información, donde se exhiben también unos vídeos del artista cordobés Pepe Espaliú, fallecido de sida en 1993 con tan solo 38 años.

"Cuando se descubrió la virulencia de la enfermedad, se lanzaron unas campañas de prevención muy agresivas, que pusieron las bases para años de miedo, condena y marginación", explica Darbyshire. La discriminación de los homosexuales en los países del antiguo bloque soviético centra la película del lituano Deimantas Narkevicius, un alegato contra la ley homofóbica aprobada por el Parlamento de Lituania en 2009. El miedo al contagio y el pánico que se desencadenó en Francia en la década de 1980 a raíz del escándalo de la sangre contaminada, se plasman en la instalación de Latifa Echakhch: un muro de ladrillos que se disgrega bajo la mirada del visitante.

Hay piezas más simbólicas, como el telón teatral doblado para siempre jamás del griego Christodoulos Panayiotou y la reproducción a tamaño natural de la llama de la Estatua de la Libertad, fragmentada y desparramada en el suelo, del vietnamita Danh Vo. Otras son más narrativas como la serie In the time of Aids, de David Goldblatt, y el vídeo de la chilena Lorena Zilleruelo que, a partir del testimonio de una mujer infectada por su pareja, mezcla realidad y ficción en una historia de amor y muerte a ritmo de tango.