UPN tendrá cinco consejerías en el Gobierno, y los socialistas tres

El Comité Regional del Partido Socialista de Navarra (PSN) dará hoy, sábado, previsiblemente, el visto bueno al acuerdo alcanzado esta semana entre la dirección de su partido y UPN para la formación de un Gobierno de coalición. Según las fuentes consultadas, este Ejecutivo estará presidido por Yolanda Barcina y contará con ocho consejerías, en lugar de las 10 actuales, cinco para UPN y las tres restantes para el PSN, incluida una vicepresidencia para el secretario general, Roberto Jiménez.

Aún quedan por conocer las carteras que corresponderán a cada uno y los nombres de las personas que las dirigirán, pero el de la vicesecretaria general del PSN, Elena Torres, ya suena como seguro para el departamento de Asuntos Sociales. También es seguro que Jiménez será además de vicepresidente, consejero de Presidencia, Justicia e Interior y podría además asumir las funciones de otra área, mientras que UPN dirigirá las líneas de gestión económica de la comunidad, además de Educación, Sanidad y otra vicepresidencia. Y entre las carteras que también suenan para los socialistas destacan Obras Públicas, Vivienda Administración Local, Medio Ambiente o Cultura.

El PSN renunció a dirigir la Cámara a cambio de tener una cartera más

De esta forma, Yolanda Barcina, alcaldesa de Pamplona durante los últimos 12 años, se podría convertir esta misma semana en la primera mujer presidenta de la Comunidad foral, para sustituir en el cargo a Miguel Sanz. Prueba de que el acuerdo está ya cerrado es que la Mesa y la Junta de Portavoces del Parlamento foral han optado por adelantar el calendario que tenían aprobado con carácter provisional para que la candidata exponga ante el Pleno el programa de gobierno el próximo 23 de junio, en lugar del 27 como inicialmente estaba previsto.

Los contactos se han intensificado en las últimas horas con la idea llegar con un acuerdo concreto a la cita de hoy del comité regional del PSN, que asimismo fue convocado en sesión extraordinaria y urgente. De hecho, algunos de los miembros de ese órgano no conocieron hasta el pasado jueves el importante encuentro de hoy, que comenzará a las diez de la mañana en la sede del partido en Pamplona. A la misma hora se reunirá también el comité ejecutivo de UPN.

Así, el próximo lunes, el nuevo presidente del Parlamento foral, Alberto Catalán, realizará la primera ronda de consultas con todos los grupos parlamentarios para conocer si existe ya algún candidato a la presidencia de Navarra. Si el nombre de Yolanda Barcina sale con mayoría suficiente, se convocaría ese mismo día el pleno de investidura para los días 23, 24 y 25.

En esa sesión, Barcina contará con el apoyo seguro de los 9 parlamentarios del PSN, que junto con los 19 de UPN suman 28 votos, dos más de la mayoría absoluta. Se desconoce todavía si se podría sumar también los votos de los cuatro representantes del PP, o si finalmente estos optan por abstenerse para mostrar su posición contraria al acuerdo con los socialistas. A partir de entonces, la nueva presidenta cerraría oficialmente la conformación de su Ejecutivo, que podría presentarse como tal antes de las fiestas de San Fermín, que comienzan el 6 de julio.

Con todo, y a falta de captar las fotografías oficiales, ya no hay espacio para la incertidumbre que tensó la política navarra las semanas siguientes al 22 de mayo. Las elecciones autonómicas y municipales dejaron varios escenarios abiertos para el PSN, que volvía de nuevo a tener la llave, a pesar de haber obtenido los peores resultados de su historia. Las opciones pasaban por pactar un Gobierno alternativo a UPN junto a Nafarroa Bai, Bildu e Izquierda-Ezquerra; pasar a la oposición o bien, como finalmente ha ocurrido, entrar en el Ejecutivo con los regionalistas.

Tras la ronda de contactos que mantuvieron con todas las fuerzas políticas y que finalizó con la renuncia a una posible investidura de Roberto Jiménez que pudiera contar con el apoyo de Bildu, el camino quedó despejado.

Además, la elección del regionalista Enrique Maya como alcalde de Pamplona el pasado sábado con el voto en blanco del PSN, y la investidura del también miembro de UPN Alberto Catalán el miércoles como presidente del Parlamento, allanaron definitivamente el camino en las negociaciones. De hecho, los socialistas habrían renunciado a la presidencia de la Cámara para optar a dirigir tres consejerías en vez de dos, con el objetivo último de ambas formaciones de cerrar un Gobierno estable y un programa claro, para gobernar la comunidad sin demasiados sobresaltos los próximos cuatro años.