El PP barre al PSOE en Málaga

Los malagueños han entregado al PP un poder absoluto en la provincia de Málaga, de punta a punta, con una victoria apabullante, más de 18 puntos de ventaja. Consolida la mayoría absoluta en las ciudades donde la tenía, y en el caso de la capital incluso con dos concejales más. Arrebata al PSOE algunas de sus alcaldías históricas como las de Mijas y Antequera (donde se presentó como candidata la presidenta regional de los socialistas, Rosa Torres), además de las de Vélez-Málaga, Estepona, Rincón de la Victoria o Coín, y dispondrá por primera vez de mayoría absoluta en la Diputación Provincial, donde obtiene una victoria más holgada que el resultado ajustado que el propio partido pronosticaba. El PP gobernó el organismo supramunicipal entre 1995 y 1999, pero con mayoría simple.

El PSOE pierde Vélez, Antequera, Rincón, Mijas, Coín y, si PP y PA pactan, Ronda

Solo en Ronda, el PSOE mantiene el pulso al empuje popular, aunque empata a siete concejales y puede perder la alcaldía si los populares pactan con el PA. Pese a la hecatombe, el secretario provincial del PSOE, Miguel Ángel Heredia, sorprendió al calificar los resultados de "agridulces".

El PP, además, rompe con la teoría según la cual solía beneficiarse de una baja participación en las urnas. Si hace cuatro años, Francisco de la Torre revalidó su mayoría absoluta con el segundo índice de abstención más alto de la historia, 49,82%, ayer, con cinco puntos más de participación que entonces, logró ampliar su mayoría absoluta a la que sumó dos nuevos concejales, 19, igualando el techo histórico conseguido por Celia Villalobos en 1999. Con el 99% de los votos escrutados, el PP sumaba el 53,45%, más de dos puntos por encima de hace cuatro años. El PP, por tanto, no solo no presenta ningún atisbo de desgaste tras 16 años de gobierno municipal, sino que amplía su hegemonía sin que los proyectos estancados en la ciudad, las sombras sobre las adjudicaciones de contratos a dedo o la falta de entendimiento con otras administraciones le pasen factura.

El alcalde interpretó los resultados como un "estímulo para seguir trabajando" e instó a su equipo a aceptarlos con "responsabilidad y humildad para no ser prepotentes".

Los avances de participación a lo largo de la jornada ya hacían presagiar una victoria de gran dimensión, pues señalaban grandes incrementos en los distritos tradicionalmente más favorables al PP -del 14,6% de hace cuatro años al 51% a las 18.00 horas en el centro, por ejemplo-. El PP ha ganado en los 11 distritos electorales de la capital, y en algunos donde hace cuatro años perdió, aunque ajustadamente, como Carretera de Cádiz, ha ganado ahora por 16,8 puntos de ventaja sobre el PSOE.

En la capital, la candidatura socialista que encabezaba por primera vez María Gámez, delegada del Gobierno de la Junta los últimos tres años, ha perdido tres concejales, y se retrotrae a los nueve que tenía hace 12 años, cuando el PP logró su primera mayoría absoluta. El PSOE no ha llegado al 25% de los votos, y ha perdido más de 12 puntos (23.000 papeletas menos que en 2007).

La debacle socialista "no tiene ambages", según admitió la propia candidata. "No hay comentario que se le resista", dijo, y aseguró que el resultado es un "acicate para trabajar más y mejor y entregarse a una oposición intensa durante cuatro años".

Por el contrario, IU ha dado un importante tirón, con 10.000 votos más que hace cuatro años, aunque en términos porcentuales apenas son tres puntos, por lo que el rédito es solo de un concejal más (3). IU, sin embargo, ha tenido resultados desiguales en la provincia, e incluso pierde un diputado provincial.

De los principales municipios de la provincia, solo en Benalmádena el PP necesitará de pactos para gobernar.