Cuatro horas de intercambio en las redes sociales y una invitación a Ajuria Enea

El lehendakari, Patxi López, sorprendido por la acogida masiva a su disposición a debatir ayer a través de las redes sociales con el movimiento Democracia Real Ya, reconoció las muestras de descontento como "una llamada de atención" que los políticos tienen la obligación de atender. Las carencias que han causado el estado de ánimo y de opinión que refleja el movimiento surgido de esa irritación social "estaban ante los ojos" de los políticos y les emplazan, sostuvo.

López no solo dedicó ayer cuatro horas enteras -con un sandwich ante el ordenador por todo almuerzo- a debatir con quien quiso interpelarle, sino que se identificó con parte de la causa y respondió al reto de acudir a los lugares de concentración con un ofrecimiento a recibir en Ajuria Enea a los protagonistas de las protestas tras el 22-M.

"Yo también me indigno por la limitación de la política", afirmó, mientras quienes provocaron la crisis imponen sus condiciones a Gobiernos y países enteros. Sin embargo, rechazó que el ejercicio de la misma sea inútil o que se iguale a sus protagonistas, sean en materia de corrupción y honradez, sea en los proyectos y políticas.

El lehendakari, quien defendió que los ciudadanos muestren su "inconformismo", admitió a sus interlocutores que el sistema de partidos necesita reformar "cosas que chirrían". "Tal vez ha llegado la hora de abrir un nuevo debate sobre la ley Electoral", para mejorar la representación, apuntó. "Que vuestra indignación sea el motor de las reformas necesarias", concluyó el mensaje en vídeo con el que resumió su posición ante la avalancha de preguntas.