La tromba de agua obliga al desalojo de 300 casas en Cañete de las Torres

Pasear ayer por Cañete de las Torres (Córdoba) era hacerlo por un lodazal. Este pueblo del Alto Guadalquivir sufrió una intensa riada el miércoles por la tarde, que costó la vida a una mujer de unos 80 años. La fuerza del agua reventó las puertas y ventanas de su casa, de una planta de altura, y la arrastró hasta el cercano arroyo del Cañetejo. Su cadáver se encontró a unos 700 metros. El marido de la fallecida pudo agarrarse a una máquina agrícola, lo que le salvó la vida. En Villa del Río, un pueblo vecino, también se sufrieron inundaciones.

El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, suspendió el acto que tenía previsto celebrar ayer en Córdoba para visitar estos pueblos. Griñán aseguró que las consejerías de Gobernación, Obras Públicas y Medio Ambiente, en colaboración con el propio Ayuntamiento ya están trabajando para "solucionar cuanto antes los problemas, para limpiar el pueblo, para ver cómo se rehabilitan las viviendas y, sobre todo, dar cuenta de los daños para repararlos".

Griñán suspende sus actos en Córdoba para visitar la zona

En Cañete de las Torres cayeron entre 100 y 140 litros por metro cuadrado y granizo, que provocó una balsa de hielo, afectando al sistema de drenaje. Los vecinos afectados y trabajadores del Infoca, bomberos y técnicos de Servicio de Emergencias 112 se afanaban en sacar el agua de las casas usando todo lo que tenían a mano: escobas, cubos, bombas o excavadoras. En algunas viviendas, como la de María Ángeles Ponce, la riada superó los dos metros de altura: "Acabábamos de reformar la casa. Y todo se lo ha llevado. Solo nos quedan las lámparas". "Y la peluquería de mi madre, que estaba en la parte de atrás, arrasada también", continúa Ponce, quien se quejaba ayer de la poca ayuda recibida del Ayuntamiento. "La bomba para sacar el agua es de un vecino que nos la ha dejado. Aquí estamos todos ayudándonos porque no ha venido nadie", se lamentaba.

El subdelegado del Gobierno en Córdoba avanzó que unas 40 personas de Cañete de las Torres y 60 de los huertos familiares de Villa del Río, además de 120 personas que se encontraban en los polígonos de esta última localidad, fueron evacuadas por la tromba, informó Europa Press. Entre 30 y 40 personas fueron realojadas en casas de familiares. Entre 200 y 300 viviendas sufrieron el aluvión de agua. Y una treintena de coches fueron arrastrados. "Flotaban por la calle", explicaba ayer una vecina de Cañete.

Uno de esos vehículos golpeó una de las ventanas de la casa de la fallecida y permanecía ayer atrapado por el barro junto a la vivienda.