_
_
_
_
_
Reportaje:FÚTBOL | 36ª jornada de Liga

Desencuentro total

Forlán y Quique tuvieron que ser separados tras la derrota del Atlético en Santander

José Marcos

El martes por la noche Quique Flores y Diego Forlán casi llegaron a las manos tras la derrota en Santander, en la que el entrenador del Atlético señaló al delantero uruguayo como uno de los responsables, si no el principal, de la remontada del Racing en El Sardinero. "Yo veo al equipo todos los días y sé la disponibilidad de los jugadores con los que cuento. A veces me equivoco, pero los asuntos están claros y las cartas están sobre la mesa. No hay nada que indagar. Ha tenido 35 minutos, 40 con el descuento y ya habéis visto los minutos de Forlán. Cuando el equipo ganaba no se habló de su suplencia", proclamó Quique. Las consecuencias no se hicieron esperar. Avisado de la rajada a través de un sms, el futbolista se levantó de su asiento en el autobús camino del aeropuerto cántabro y se acercó a la parte delantera, donde se encontraban Quique y el resto del cuerpo técnico, a pedir explicaciones. Según varios testigos, el intercambio de opiniones se endureció de tal modo que varios integrantes de la expedición tuvieron que intervenir para evitar que la discusión pasara de las palabras a los hechos.

Más información
"Es mi último partido en el Calderón"

La bronca fue el punto final a una relación que ha experimentado un cambio radical. Hace un año el Atlético ganó la Liga Europa, su primer título en 14 años, el tercer trofeo de la casa extramuros desde la Recopa de 1962 y la Intercontinental de 1974. Forlán fue el principal responsable de la gesta. "Diego es un profesional como la copa de un pino. Le hemos pedido sacrificio y nos lo ha dado, le hemos pedido trabajo y también nos lo ha dado, esfuerzo en los momentos más duros y respondió como un recién llegado...", le ponía entonces por las nubes.

El cuento ha cambiado por completo desde entonces, por más que el preparador fuera uno de los más firmes defensores del atacante, que está firmando su peor temporada (ocho goles en la Liga, uno en la Liga Europa y uno en la Copa) en España. "Cuando marca no se dice nada. Cuando no, parece que solo le pasa a él. Se responsabiliza en exceso", decía Quique cuando el doble Bota de Oro y mejor jugador del Mundial de Sudáfrica se pasó 12 duelos seguidos sin marcar en el paso del otoño al invierno. El jugador, de arrancar tardío, inofensivo en las primeras vueltas y un depredador en las segundas, acusó el esfuerzo del curso anterior y la falta de descanso tras la Copa del Mundo.

Tras unas minivacaciones, Quique le pidió un esfuerzo suplementario para pelear la final de la Supercopa de Europa al Inter. Forlán hizo en 15 días el trabajo de un mes y medio. Aunque no destacó en Mónaco, arrancó como un tiro en la Liga, con tres goles en las dos primeras jornadas. Fue un espejismo en una campaña en la que ha disputado 14 encuentros completos de 49 posibles, el último en marzo. Todo empezó a torcerse en octubre en Vila-real (2-0), donde Forlán disputó unos minutos. Quique le reprochó su falta de intensidad en el calentamiento. Fue el principio del fin de una relación que se agravó con otros roces, como que el técnico le dejara fuera del once contra Osasuna porque venía de competir con Uruguay. Ese día sí jugó Godín, y Diego Costa marcó un hat trick que le convirtió en titular.

El entrenamiento de ayer comenzó con una tensa reunión de 45 minutos. El uruguayo, irritado, reprochó al técnico que le criticara en público y le ignorara en privado. "No había que señalar a nadie", afirmó después Antonio López, expresando el sentir de un grupo que pidió al entrenador que dejara de hacer probaturas con el sistema para dejar fuera a Forlán. Pitarch cerró el sanedrín insistiendo a los jugadores que deben ganar para garantizarse un lugar en Europa y que Quique no seguirá. En principio, como él.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

José Marcos
Redactor de Nacional desde 2015, especializado en PSOE y Gobierno. Previamente informó del Gobierno regional y casos de corrupción en Madrid, tras ocho años en Deportes. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Trabajó en Starmedia, Onda Imefe y el semanario La Clave.
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_