'Piratas del Caribe' estrena videojuego con figuras Lego

Los videojuegos con muñecos articulados Lego, expresivos y cercanos a pesar de prescindir de cintura, codo o rodilla, se estrenaron con Star Wars, la guerra de las galaxias. Después llegaron las adaptaciones de clásicos como Indiana Jones, Batman y, uno de los más vendidos, Harry Potter.

Piratas del Caribe, la película que surgió a partir de una atracción de Disneylandia, estrena su cuarta entrega el mismo día que se lanza el videojuego. Phillip Ring, productor del videojuego, explica qué necesita un filme para adaptarse al universo de las figuras amarillas: "Ser fácilmente reconocible, popular, con carácter propio, casi icónico y que guste a grandes y pequeños. No es fácil encontrarlo". Lego Piratas del Caribe no se centra en una sola película, sino que une la trama de las cuatro y crea una aventura nueva.

Resulta curioso ver a Jack Sparrow mover su melena, sombrero y joyas al mismo ritmo al que lo hace en la gran pantalla. Se mantiene la esencia del personaje, cuestión difícil a pesar de las limitaciones que tienen los muñecos articulados de Lego. "Este ha sido un factor clave en la creación del cartucho. No queríamos que solo se parecieran, sino que fueran igual que en la película", explica Ring. "Trabajamos de cerca con los actores para saber sus movimientos. Hemos sido especialmente cuidadosos con los momentos en que están en el agua y con los duelos a espada".

De paso, echa una flor a la actriz española Penélope Cruz, que también tiene su propio personaje: "No es de los iniciales. Para jugar con ella hay que tener pericia suficiente y avanzar en la aventura. El personaje de Penélope destaca por su habilidad en esgrima", añade el productor.

El título sale en casi todas las plataformas a la vez: las consolas portátiles de Sony y PlayStation 3, Nintendo, Wii y las computadoras PC y Mac. Sin embargo, hay una versión de la que Ring se siente especialmente orgulloso, la de Nintendo en tres dimensiones, la 3DS: "No solo por el reto de hacer una inmersión en tres dimensiones, con nuevos controles y perspectivas que cambian la narrativa, sino también por el factor social. El hecho de poder desbloquear partes extra del juego y personajes especiales al cruzarse con otros jugadores crea una nueva experiencia".

El último factor clave para el éxito de esta saga es la jugabilidad, una característica que se puede definir como la capacidad de enganche. La verdadera obsesión de Ring estriba en "que lo puedan jugar grandes y pequeños. La trama es sencilla, pero cuidada e inteligente. Juegan padres e hijos juntos, por eso, para jugar en grupo no hace falta empezar una nueva partida, sino que basta con tomar el mando de control y sumarse". Un juego más, pensado para el disfrute en familia.