La Audiencia rechaza la recusación de Otegi contra la juez Murillo

La Sala del 69 de la Audiencia Nacional, formada por su presidente, Ángel Juanes, los presidentes de sus tres salas (Penal, Contencioso-Administrativo y Social) y los magistrados más antiguo y más moderno de cada una de ellas, rechazó ayer la recusación presentada por el exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi contra la presidenta de la Sección Cuarta, Ángela Murillo, y sus magistrados Teresa Palacios y Juan Francisco Martel. Otegi pidió que salieran del tribunal que debe juzgarle por el caso Bateragune, un intento de refundar la formación ilegalizada, porque en un juicio anterior contra él por enaltecimiento del terrorismo Murillo había mostrado falta de imparcialidad, según concluyó el Tribunal Supremo.

Durante este último juicio, en el que se acusaba al exlíder de Batasuna por su participación en un homenaje al etarra José María Sagarduy, Gatza, puesto en libertad la semana pasada, Murillo preguntó a Otegi si condenaba la violencia. Este se negó a contestar, a lo que la magistrada respondió: "Ya sabía yo que no me iba a responder a esa pregunta". El acusado le replicó: "Y yo que iba a hacerla". Ese episodio sirvió al Supremo meses después para anular la sentencia -que condenaba a Otegi a dos años de cárcel- y ordenar que se repitiera el juicio con un tribunal diferente. El alto tribunal consideraba que con su actitud durante el juicio, Murillo había expresado un prejuicio contra Otegi.

'Caso Bateragune'

Otegi aprovechó los argumentos del Supremo para intentar apartar a Murillo y a los otros dos magistrados que formaban sala -Juan Francisco Martel y Teresa Palacios- de otro caso mucho más trascendente. El que juzga a los componentes de Bateragune, la mesa de coordinación de la izquierda

abertzale, en el que Otegi y el exlíder de LAB Rafael Díez Usabiaga se juegan sendas condenas a 10 años por pertenencia a banda terrorista. Al afectar la recusación a más de un magistrado, tenía que resolverla la Sala del 69.

La decisión se adoptó por siete votos a dos y considera que las palabras de Murillo "no suponen una vulneración del derecho al juez imparcial, al no haberse anticipado un pronunciamiento que prejuzgara la resolución del litigio", es decir, del caso Bateragune. Dos magistrados, Jesús Escudero de Blas (de la Sala de lo Contencioso) y Javier Martínez Lázaro (Sala de lo Penal), votaron a favor de la recusación. Este último ha anunciado un voto particular discrepante con la resolución.