Los restos del acueducto de Lugo se abrirán al público en verano

El acueducto romano de Lugo, que en parte asoma en la calle San Marcos, data del siglo primero. Su construcción, según los expertos, se decidió durante la época del emperador Claudio (del 41 d.c. al 54 d.c). Las obras que se realizan en esta calle, para convertirla en una plaza peatonalizada, dejaron al descubierto el canal en su itinerario por el casco viejo de Lugo. La infraestructura tiene unos de 2,5 kilómetros de longitud desde la captación. "Se hizo en época de Claudio y fue una de las grandes primeras obras de infraestructuras que hubo en Lugo. Por los datos que tenemos se hizo el foro e inmediatamente la siguiente preocupación fue traer agua a la ciudad", puntualiza la arqueóloga municipal, Covadonga Carreño.

Carreño acompañó ayer al alcalde, Xosé López Orozco, en una visita a estos trabajos, que, entre otras cosas, servirán para que se pueda contemplar el hallazgo antes del verano, a través de una ventana arqueológica 25 metros de largo por 2,5 de ancho, anticipó el regidor. Los pobladores del asentamiento romano en Lugo "tuvieron suerte y encontraron una captación de agua muy importante en la zona de As Pías, a dos kilómetros y medio de la ciudad", explica Carreño.

Aunque se conocía la existencia del acueducto, no se habían podido revalorizar estos restos "en ningún tramo de su recorrido" y las obras actuales persiguen precisamente "ponerlo en valor". Pero no solo se mostrará, acompañado de paneles explicativos, el acueducto, que con el paso de los siglos experimentó reformas, sino que también se podrá visualizar la transformación que sufrió en el siglo XVI. "No es una obra muy monumental", concreta Carreño, "nos encontramos solamente los basamentos de loja tanto de romanos como de las otras bases. Lo importante es ver cómo se conserva el resto de esa primera traída a la ciudad". Se trata de un canal que captaba agua del subsuelo de Lucus Agusti con un recorrido desde As Pías hasta la actual Praza de Santo Domingo, en el lugar exacto donde está emplazada ahora la galería Sargadelos. Desde aquí se distribuía el agua a toda la ciudad.

Orozco mostró su satisfacción por un hallazgo que "va a permitir que se descubra una parte importante de nuestra historia". "Y ha coincidido muy bien, en la plaza donde es más fácil hacer la musealización y dejar los restos in situ, con las explicaciones históricas pertinentes, y no va a suponer ningún retraso para la obra de la nueva plaza", se congratuló el alcalde. Los trabajos de esta plaza se espera que estén concluidos el próximo mes de mayo.

No pasó por alto Orozco el hecho de que el acueducto se puede convertir en otro elemento de atracción para los turistas en Lugo, que ya alberga también otro monumento romano que es Patrimonio de la Humanidad, la famosa muralla. "Es un atractivo más para una ciudad que necesita que el turismo sea una parte importante de su desarrollo", enfatizó el alcalde.