Gritos contra Zapatero y cánticos sobre el 'caso Faisán'

Manuel Puente, de 61 años, acudió ayer a la marcha Por la derrota del terrorismo: ETA fuera de las elecciones, que recorrió el centro de Madrid, para arremeter contra José Luis Rodríguez Zapatero. "Nos ha traicionado al negociar con los terroristas, mentido con el 11-M y se merece lo peor". La enmienda a la totalidad de la gestión del Gobierno y del PSOE marcaron la mayor parte de las críticas de los asistentes a la manifestación.
José Cascales, antiguo ejecutivo de banca de 64 años, secundó la protesta para cargar contra "las mentiras de Zapatero, que comenzó a negociar con los terroristas antes, incluso, de llegar a La Moncloa". Cascales fue a la manifestación metido en una caja con el lema Me avergüenzo de ser socialista traducido al inglés, francés y alemán. "Para que quede bien claro y que todo el mundo se entere", ironizaba este "ciudadano de a pie", que reside en Murcia.
"Zapatero se merece el peor de los castigos", afirmaba en tono grave unos metros más adelante Antonio, madrileño de 54 años. Mientras, un grupo de jóvenes pedía la pena de muerte para el presidente del Gobierno. Concha Porta, delegada de Peones Negros en Málaga, un grupo que alienta las teorías conspirativas sobre los atentados del 11 de marzo de 2004, instaba al jefe del Ejecutivo a "desvelar todas las incógnitas" sobre la masacre.
"Gobierno inmoral"
El catedrático Luis Gosálvez, de 54 años, acudió a la marcha "por principios". "Me parece inmoral que el Gobierno siga pagándole a ETA, que la banda pueda llegar a las instituciones el 22-M y que sigamos sin saber qué ocurrió el 11-M". En la plaza de Colón, impecablemente vestido, Pepe, administrativo de 60 años que se niega a desvelar su apellido, animaba a la sociedad a "rebelarse" contra "los comportamientos nazis y antisociales". "El Gobierno tiene la culpa de todo y alguien debería decirnos por qué nos miente", aseguraba con el estruendo de fondo de proclamas como "España es una y no 51", "se va el faisán, se va con el Rubalcaba" o "es lo mismo Gobierno y terrorismo".
Antonio Portillo, de 75 años, acudió a la manifestación con la intención de cargar contra la "indecencia de los maleantes". "Vivimos en un país de antisociales", zanjó ante la aprobación de su amigo, Jesús González, antiguo ingeniero técnico de 74 años, que auguró que "a este país no lo salva ni Dios".
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