Condenados un funcionario, un militar y un guardia civil por narcotráfico

La Sección Segunda de la Audiencia de Pontevedra ha condenado a nueve años de prisión, una multa de medio millón de euros e inhabilitación absoluta por el tiempo que dure la condena al cabo de la Armada destinado en Ferrol Javier González Bouzada y al funcionario de la Diputación de Pontevedra Daniel Meaño Cores por un delito contra la salud pública.

Ambos estaban suspendidos de empleo y sueldo tras ser detenidos en abril de 2007, al igual que el guardia civil Javier Ferreiro Vázquez, con destino en el País Vasco, que fue condenado a diez años y nueve meses de cárcel y multa de 775.000 euros.

Los dos primeros reconocieron los hechos en el juicio, por lo que el fiscal había modificado su escrito de acusación, confesión que fue reconocida por el tribunal. No así para el guardia, Javier Ferreiro, quien negó su participación en la entrega de cinco kilos de cocaína que le vendieron Daniel Meaño y Javier González y cuya declaración exculpatoria fue calificada de "inverosímil" en la sentencia.

Otros seis vecinos de Arousa tendrán que cumplir tres años de cárcel

Como vendedores y distribuidores de cocaína, también fueron condenados a tres años de prisión y multas de 6.000 euros Javier Barbosa Araujo, Joaquín Manuel Pérez Iglesias, Francisco Javier Prado Francisco, Francisco Javier Tourís Santorum, José Antonio Iglesias Bouzón, y José Antonio Nine Iglesias.

Además de admitir los cargos todos ellos, vecinos de la comarca de Arousa, los cinco últimos, junto con Daniel Meaño y Javier González, también se declararon consumidores habituales de cocaína.

Según los hechos probados, el 2 de abril de 2007, Javier González y Daniel Meaño concertaron la venta de cinco kilos de cocaína, con un grado de pureza del 78,31%, y un valor en el mercado de 476.000 euros, al guardia Javier Ferreiro.

Para ello, González se desplazó al hostal Sanmartín, en Curro, Pontevedra, donde se había citado con Ferreiro en la habitación 112 para que este le hiciera entrega de una parte del dinero. Después, González se reunió en el bar Fraguas de la autovía del Salnés con Daniel Meaño para que este le entregara la droga.

De regreso al hostal con los cinco paquetes de cocaína de un kilogramo cada uno, Javier González fue interceptado por agentes de la Udyco que además de la droga le intervinieron en los bolsillos 3.250 euros en billetes. A continuación, fue detenido Javier Ferreiro en la habitación del hostal donde también le aprehendieron 16.400 euros.

Dos horas más tarde, la Policía arrestó en su casa de Ribadumia a Daniel Meaño, que llevaba en su poder 585 euros, dos teléfonos móviles y una nota manuscrita donde llevaba cuenta de los ingresos por la venta de cocaína: "Hay 142.800, tiña que haber 153.750, restan 10.950". Tras el registro de su domicilio se incautaron también de 142.380 euros que supuestamente le acababa de entregar Javier González de la partida de cocaína que había concertado con el guardia vasco.