Los sindicatos denuncian a Alestis

Los sindicatos con representación en la empresa aeronáutica Alestis en Cádiz presentaron ayer una denuncia en la Inspección de Trabajo contra la orden de vacaciones forzosas dictada por la empresa, que la compañía acordó tras agotarse el periodo de formación de la plantilla sin que la firma cuente con carga de trabajo con la que dar labor a los operarios. La denuncia señala que la plantilla cuenta con un contrato que obliga a la empresa a asumir sus compromisos con la parte social.

Los 119 trabajadores afectados volvieron ayer a concentrarse durante ocho horas, su horario laboral, en las puertas del centro donde habían recibido los cursos, en el parque Tecnobahía de El Puerto de Santa María, como muestra de rechazo al inicio vacaciones retribuidas a la espera de la llegada de carga de trabajo.

Los sindicatos temen la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo. El consejero de Empleo, Manuel Recio, aseguró ayer desconocer las intenciones de la compañía, y descartó que se haya presentado ninguna acción de regulación por parte de la aeronáutica.

Tampoco el consejero de Economía, Antonio Ávila, quiso pronunciarse sobre la situación de Alestis, de la que insistió "es una empresa privada, y tiene sus órganos de gobierno", pese a que la mayoría del capital está en manos públicas. Esta situación coincide con novedades sobre la compañía, que ayer hizo público que esta semana ha entregado a Airbus los primeros prototipos del cono de cola del A-350, uno de sus principales proyectos.

Los sindicatos apoyaron ayer, además, la posible fusión de Alestis con las otras dos aeronáuticas españolas, la burgalesa Aciturri y la vasca Aernnova, que recomienda el informe elaborado por Boston Consulting Group a demanda del consorcio europeo Airbus.

Según Pedro Lloret, de CC OO, "da la sensación de que si queremos ser un referente del sector, es posible que tengamos que asumir un mayor nivel con el que ofertar mayores paquetes de obras". El sindicalista explicó que experiencias similares se han aplicado ya en Alemania y Francia. No comparte esa opinión el PP. Su presidente provincial en Cádiz, José Loaiza, advirtió sobre el riesgo de que este tipo de fusiones provoque el desvío de futuras cargas de trabajo a otros centros de trabajo.