Notas que enganchan al público

"La música antigua engancha. Tras escuchar versiones de compositores del Barroco hechas de la forma y modo en que se hacían en su época, mucha gente no vuelve a escuchar versiones con instrumentos modernos", afirma Marina Barredo, que toca la viola en la formación Archivo 415. Su grupo actuará, junto a Leonardo Rossi, en el convento de Santa Clara el 20 de marzo como clausura del Festival de Música Antigua de Sevilla. Esta cita musical, que inició ayer su 28ª edición, estrena espacio en el convento de Santa Clara, donde se celebrarán la mayoría de los 21 conciertos.

El nuevo espacio, Centro Cultural Santa Clara (calle Becas, s/n), depende del Instituto de la Cultura y las Artes del Ayuntamiento de Sevilla (ICAS). Además de Santa Clara, son escenario de varios conciertos la sala Joaquín Turina del Centro Cultural Cajasol, el café Casino de la Exposición y la iglesia de San Alberto.

"El canal para llegar al corazón de la gente es más rápido", afirma Alqhai

"Ahora lo más innovador en España es este estilo musical", dice Marina Barredo

El director del festival, Fahmi Alqhai, ha centrado su atención en las formas más peculiares de composición de la música antigua. Presenta estilos marcados por las expresiones musicales más extremas de compositores como Ockeghem o Buxtehude bajo el lema Manierismos y extremos musicales. Para Alqhai la "música antigua está ahora mucho más cercana al entendimiento del público". "La barrera entre la música y el público está casi rota. Es una música menos sofisticada que la de, por ejemplo, Mähler o Bruckner. La música antigua llega mucho mejor al público. Una canción de Monteverdi convence a cualquiera. El canal para llegar al corazón de la gente es mucho más rápido. Es una música popular, muy cercana a la gente", afirma el director del festival.

El que las formaciones sean pequeñas contribuye a esta proximidad. "Un dúo que toca ante el público ofrece una pequeña explicación sobre una pieza. Y eso acerca a los asistentes", precisa Alqhai. "Del 90% de la música escrita en los siglos XV al XVIII tenemos el esqueleto. Hay mucha libertad para el intérprete. No hay una sola manera de tocar a Bach. La música antigua es una música para manosear, para hacerla tuya", concluye Alqhai.

Juan Sancho, tenor e invitado frecuente del grupo Hippocampus, que interpretará el día 18 en Santa Clara Armonía eterna. Cantatas y música de cámara de J. S. Bach, cree que "en contraposición a la música sinfónica más convencional, la música antigua ofrece un formato normalmente más cercano". "Es raro que un concierto de música antigua exceda de los 20 intérpretes y su trabajo es un poco más renovador, menos tradicionalista. El formato no está tan anquilosado. Se crea un tipo de complicidad especial. Hay una interacción con el público. En muchas ocasiones, los músicos dan explicaciones sobre las obras que van a interpretar. Eso crea una mayor cercanía, algo que es muy infrecuente en un concierto sinfónico", afirma Sancho.

"La música antigua es diferente, es novedosa. Se investiga más que en la música moderna. En la música antigua juegan cosas como la improvisación. Ahora lo más innovador en España es la música antigua. La música moderna se ha quedado restringida a las orquestas oficiales y tiene un público muy tradicional. Es más fácil innovar en música antigua que en música moderna", comenta Barredo.

"Es bonito asomarse a una ventana, escuchar sonidos de otra época y ver de dónde venimos", asevera José Luis Pastor, director del grupo Axabeba. Pastor toca cuerda pulsada medieval. Axabeba presenta Mariam matrem en el café del Casino el 12 de marzo. Para Pastor, uno de los atractivos principales de la música antigua es "poder echar una mirada atrás y escuchar cómo suena un laúd, una flauta travesera medieval o un órgano de fuelle".

"La música antigua es más abierta. Las piezas sinfónicas tienen más ataduras. En la Edad Media están las líneas melódicas sin indicaciones de instrumentos ni matices. No tenemos más remedio que aportar una dosis personal alta", agrega Pastor.

Los conciertos de Manierismos y extremos musicales reúnen en Sevilla formaciones del prestigio de la Orquesta Barroca de Helsinki, el conjunto belga Graindelavoix y la Accademia del Piacere. El festival incluye la Semana de la Viola da Gamba con Jordi Savall (Hesperion XXI), Nima Ben David, Juan Manuel Quintana, Rodney Prada o Vittorio Ghielmi. Ventura Rico presenta el concierto de apertura del programa junto a Vie Sul Mare hoy en Santa Clara.

La música que se hace en Sevilla tendrá un lugar con el programa doble de la Orquesta Barroca de Sevilla, Archivo 415 & Leonardo Rossi, Mercedes Ruiz & Alfonso Sebastián, y Juan Sancho como integrante de Hippocampus. El festival homenajea a Tomás Luis de Victoria, uno de los grandes compositores de la España del Siglo de Oro. Más información www.femas.es.