Mujer desempleada busca...

Vuelve el 8 de marzo y de nuevo asistiremos a una amplia difusión a través de los distintos medios de comunicación del papel de la mujer en todos los ámbitos. Otra vez se reivindicarán la falta de igualdad real de derechos y oportunidades y se pondrá de manifiesto que sin nosotras la maquinaria no puede funcionar; ya imposible.

¿Pero cuándo dejaremos de verdad de ser espectadoras pasivas en un mundo donde los mercados son quienes dictan órdenes y provocan cambios? ¿Cuánto tiempo tiene que pasar aún para que se nos reconozca a cada una de nosotras en nuestra individualidad y en nuestra diversidad?

La realidad se impone fríamente. Soltera o casada, con un extenso currículo y un amplio bagaje profesional o sin contar con experiencia laboral alguna, con formación universitaria o sin ella, muchas mujeres de nuestro país siguen teniendo algo en común: el paro. La tasa de empleo masculina en España es del 54,2%, porcentaje que supera en 12 puntos a la femenina, que se sitúa en el 41,7%. Nuestra presencia en los órganos de decisión, donde se marcan las estrategias y se toman decisiones relevantes, no pasa de un 5%, y en cuanto al trabajo autónomo, el peso de la mujer es muy inferior al de los varones, representando únicamente el 33,9% del total de afiliados al régimen especial de trabajadores autónomos de la Seguridad Social.

La discriminación provoca que se exija a la mujer niveles de competencia extremos

Los datos evidencian la existencia de barreras que deben eliminarse, tanto internas como externas, que se acrecientan en el caso de las trabajadoras por cuenta propia. La discriminación en las estructuras empresariales provoca que se exija a las mujeres niveles de competencia extremos, rechazándolas en aquellos sectores de actividad que están masculinizados, suponiendo un handicap añadido la conciliación de la vida laboral y familiar. Cuando se opta por la maternidad, por si fuera poco el número de horas que ya dedicamos al desarrollo de nuestra actividad, nos toca desdoblarnos. Debemos atender a nuestros hijos, educar en la mayoría de los casos a nuestras parejas, para concienciarlos de que las tareas propias del hogar no son algo intrínseco al género femenino, y además, cuando no podemos estar pendientes las 24 horas de todo lo que sucede en nuestro entorno familiar, luchar con nosotras mismas y esa conciencia social inculcada a través de sociedades todavía machistas, como la española, que nos hacen sentirnos "malas madres", "malas hijas" o "malas esposas o compañeras".

A pesar de todo, hemos batido récords durante la crisis. Nueve de cada diez (89,2%) autónomos que se han visto obligados a cerrar sus empresas en 2010 han sido hombres, lo que viene a significar no solo que los sectores más castigados tenían escasa presencia femenina, que es cierto, sino también que los negocios constituidos por mujeres han sido capaces de adaptarse con mayor facilidad a los cambios, demostrando su solidez y su solvencia.

El autoempleo se presenta dentro de este escenario como una fórmula idónea para muchas mujeres desempleadas y les da la oportunidad de intervenir en la economía como generadoras directas de riqueza y empleo. Los trámites de constitución y puesta en marcha son sencillos, las obligaciones fiscales son menores que en otras formas jurídicas de empresa y hoy se tiene conciencia de colectivo con intereses comunes que, gracias a organizaciones como ATA, han cambiado la situación de forma importantísima respecto a un pasado reciente.

El Área de Mujer de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) no cejará en el empeño de apoyar a todas las emprendedoras para que consigan sus objetivos. Estamos convencidas de que la presencia femenina es necesaria para que los cambios que se están produciendo en el mundo lleguen a buen puerto, por lo que impulsamos la aceptación de los diferentes estilos de gerencia de empresa y liderazgo, y no dudamos en reconocer y destacar el hecho indiscutible de la eficiencia de las empresas de las autónomas, constituyendo un ejemplo para todos los agentes que operan en la economía. -

Candelaria Carrera Asturiano es representante del Área de Mujer de la Federación Nacional de ATA y presidenta de ATA Extremadura.