Controversia felina en el campus
Dos centenares de alumnos y docentes protestan ante el rectorado de Alicante
La recomendación del Servicio de Prevención de la Universidad de Alicante, que detectó un notable crecimiento en colonia de gatos en el campus de Sant Vicent de Raspeig, de dejar de dar de comer a los felinos ha indignado a algunos alumnos, profesores y trabajadores de la institución académica. Aprovechando las redes sociales han empezado a movilizarse y a criticar la medida "unilateral". Alrededor de 200 personas se concentraron ayer ante el rectorado para sumarse a la campaña de recogida de firmas en favor de los felinos. Algunos alumnos portaban pancartas en las que se podía leer "Dejad a los gatos en paz". Ana González, una convocante, comentó que "se ha exagerado, los gatos ni atacan a la gente, ni son un problema". Antonia García, otra manifestante, recordó que la asociación Asoka el Grande está aplicando el protocolo establecido por varias instituciones para controlar el número de gatos (esterilizando la colonia, alimentándoles a base de pienso seco y con revisiones veterinarias periódicas). "El rectorado ha dado orden por escrito de retirar los comederos y bebederos y sancionar a las personas que les den comida", denuncian los organizadores de la protesta en un comunicado, en el que aseguran que un 70% de los universitarios, según una encuesta, está a favor de los gatos.
La campaña de recogida de firmas se prolongará hasta el próximo jueves. Los denunciantes tildan de "barbarie" el plan del rectorado porque si retiran la comida y el agua a los felinos, que ahora campan felices por el campus, "tememos que cualquier día desaparezcan los gatos, que ahora están siendo cuidados y controlados".
El rector, Ignacio Jiménez Raneda, aclaró que "no se pretende exterminar" a la colonia felina, sino "intentar alcanzar un equilibrio razonable". El dirigente universitario explica que los técnicos del Servicio de Prevención "alertan de una realidad, la proliferación de gatos en el campus, que supone un cierto riesgo". Según Raneda la única intención es limpiar los restos de comida para evitar molestias.
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