Cacerolada contra la privatización de AENA
La gestión privada amenaza las condiciones de 1.200 empleados
Contra la privatización: ruido. Eso es lo que hicieron ayer un centenar de trabajadores de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) a las puertas de la zona de salidas de la Terminal 4 de Barajas. Cucharas, tapas, palos... cualquier cosa valió para hacer sonar las cacerolas con las que compusieron la melodía del rechazo a la entrada de empresas privadas en el ente público, que aprobará mañana el Consejo de Ministros.
El cambio de modelo de gestión afectará a 1.200 trabajadores del aeropuerto madrileño: señaleros, bomberos, técnicos de programación y operaciones, personal del Centro de Gestión Aeroportuaria, trabajadores de atención al pasajero, técnicos de mantenimiento, personal médico o informáticos, entre otros.
"La privatización nos hará perder la condición de empleados públicos ya que se va a subrogar el servicio", criticó Abraham Escobar, uno de los portavoces de la asamblea de trabajadores que se celebró el 9 de febrero. Los manifestantes insisten en que las empresas privadas traerán consigo un servicio menos profesional y empeorarán las condiciones laborales a cambio de incrementar los beneficios. Escobar advirtió de los perjuicios que el nuevo modelo de gestión tendrá, también, para los viajeros: "Tasas más caras, menos calidad y menos seguridad".
Los manifestantes niegan que Barajas sea deficitario y alegan que obtiene unos beneficios de 280.000 millones de euros. "Las obras de la T-4 han generado una deuda pero la inversión estará amortizada en 10 años", afirman. Lamentan, además, que Fomento haya decidido privatizar dos de los tres aeropuertos con más tráfico de España -Barajas y El Prat de Barcelona-.
A finales de enero los delegados sindicales de CC OO, UGT y USO rompieron las negociaciones con el Ministerio de Fomento ante el estancamiento del acuerdo para garantizar los puestos de trabajo y las condiciones laborales. El representante de la federación de servicios públicos de UGT, Fermín Arias, anunció ayer que "irán a la huelga" si el Ministerio no asegura los derechos de los 12.000 trabajadores de AENA en toda España.
Las movilizaciones comenzaron el pasado 3 de noviembre. El 14 de febrero iniciaron una acampada en la T-4 y hoy han convocado un paro simbólico de siete a nueve de la tarde. Las protestas culminarán el sábado con una manifestación respaldada por todos los sindicatos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.