_
_
_
_

La psicóloga de la cárcel dice que Carcaño cambió tras acusar al menor

La psicóloga de la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla), donde está ingresado Miguel Carcaño, aseguró ayer que el comportamiento del asesino confeso de Marta del Castillo cambió después de que, el 16 de marzo de 2009, diera una nueva versión del crimen en la que por primera vez implicó al menor conocido como El Cuco en la violación y muerte de la joven.

La psicóloga aseguró al juez de Menores, que antes de esa declaración Carcaño estaba "estable y controlado" y pasó a "empeorar anímicamente" y a estar "alterado, confuso y ansioso", según contaron los abogados presentes en el juicio del menor, que se celebra a puerta cerrada.

El 26 de marzo de 2009, justo diez días después de aquella declaración judicial de Carcaño, el preso intentó, supuestamente, quitarse la vida en los baños de la cárcel ahorcándose con el cordón de un pantalón de chándal. La psicóloga de la prisión afirmó ayer que el intento de suicidio "fue real".

Credibilidad

Para los padres de la víctima y sus abogados, estas revelaciones añaden credibilidad a la violación y asesinato confesado por Carcaño. "Es extraño que alguien que va a quitarse la vida no diga la verdad", señaló el abogado de la familia, José María Calero. El defensor de El Cuco, no comparte esta interpretación: "Intentó suicidarse porque había dicho una mentira y le remordía la conciencia".

Además de la psicóloga, en la sesión de ayer del juicio contra el menor acusado de participar en la violación y asesinato de Marta del Castillo, prestaron declaración otros cinco testigos, entre ellos un joven que estuvo estudiando un día después del crimen en el piso donde se produjeron los hechos. El testigo aseguró que le extrañó el olor "a limpio y a lejía" y que tuvo que insistir a María García, novia del hermano de Carcaño, para que cerrara las ventanas porque estaban todas abiertas y hacía frío. Este joven aseguró también que El Cuco estuvo esa tarde en el piso "para recoger unos CD".

También declaró ayer la jefa de Carcaño en la empresa de limpieza en la que trabajaba. La mujer reveló que el joven llegó a su trabajo a las 5 de la madrugada, como debía, pero se ausentó poco después diciendo que tenía que entregar unas llaves a su hermana. Los abogados de la familia destacaron la falsedad de esta afirmación, puesto que Carcaño solo tiene un hermano.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_