"Hay que conquistar la confianza del empresario en el servicio público"

El director de Lanbide, Javier Ramos, apuesta por un servicio de empleo que mejore sus estadísticas a base de ofertar servicios de calidad y de lograr por esa vía que los empresarios vuelvan a confiar en lo público.

Pregunta. ¿Cómo vivió la huelga general convocada por ELA y LAB?

Respuesta. Mayoritariamente seguimos prestando servicios. Pero respeto a quienes no lo hicieron. La crisis ha generado perdidas de derechos laborales, cuestionamiento del modelo de pensiones y otros aspectos que pueden justificar la movilización de los trabajadores.

P. ¿Cuál es la situación actual del empleo en Euskadi?

R. Hemos cerrado 2010 con el convencimiento de que la crisis del mercado de trabajo ha tocado fondo. Ha habido una modesta creación de empleo que hay que atribuir a la mejora de la industria y a una cierta contención del aumento del paro.

"Las pérdidas de derechos pueden justificar la movilización"

"Hobetuz tiene poco juego. Lo oportuno sería la integración"

"El empleo es de calidad comparado con el del Estado, menos con Europa"

P. ¿Es la peor crisis que ha vivido?

R. Desde el punto de vista laboral esta es larga, plomiza, agónica, nos consume el ánimo, pero en datos cuantitativos es menor la de 1992 a 1994. Entonces había 760.000 trabajadores y en un año se destruyeron 76.000, el 10% de la ocupación en 18 meses. Es esta hemos pasado de 980.000 a 935.000, es decir, unos 45.000 empleos destruidos, el 5,5%. Esta nos afecta a lo anímico porque no la entendemos pero no es la madre de las crisis.

P. ¿Le alivia pensar que Euskadi es la única comunidad que crece en España?

R. No debe de ser un consuelo, hay que trabajar para recuperar situaciones como la de 2008.

P. ¿Se puede confiar en las estadísticas tras las contradicciones entre EPA y PRA?

R. Eustat e Inem deberían reunirse para ver cómo evitar estas cosas, pero ambos tienen operaciones estadisticas avaladas, la PRA y la EPA, que no son cuestionables. Pero reconozco que es difícil de entender que haya discrepancias en tendencias y en valores absolutos trimestrales como hemos visto.

P. ¿Cómo explica tanto desajuste en el último trimestre, dos años consecutivos?

R. Euskadi vive en paro registrado y en datos estadísticos ciclos positivos en los primeros semestres del año y más negativos los segundos. Ese puede ser un factor detectado. Otro, importante, es que en torno a 6.000 personas se han inscrito con urgencia en diciembre el INEM para poder cobrar las prestaciones.

P. Lleva un mes al frente de Lanbide. ¿Qué diagnóstico hace del organismo?

R. El Inem partió en su día con una desventaja, no era quien repartía el empleo, pero todos pensábamos que sí. Íbamos allí y al no encontrarlo nos frustraba. Tenemos que ser conscientes de que el empleo lo genera la estructura productiva. Lanbide y el resto de intermediarios tendrán que garantizar que se cubran en las mejores condiciones. Esa es la parte que Lanbide tiene que liderar, que ningún puesto de trabajo que genere la estructura productiva se quede sin cubrir, y ser más atractivos que la competencia.

P. De momento la competencia les gana, las agencias privadas intermedian un 12%, las ETT un 19%, y ustedes el 2,5%...

R. Ningún servicio público europeo llega a dos dígitos de colocación. ¿Por qué? Porque aquí están apuntados todos y en los otros servicios, no es que haya selección, pero acuden perfiles diferentes. El objetivo para 2011 y 2012, es mantener y superar esos ratios y no ser escapistas, tenemos que intentar que las empresas confíen más en nosotros, conquistar su confianza, sin renunciar a prestar unos servicios de calidad.

P. ¿Cómo va a ser el empleo del futuro más inmediato?

R. Los jóvenes tienen que entender que nuestra actividad laboral va a implicar cambios de empresa, cambios de funciones y tránsitos por el desempleo. En este momento es fundamental la información, la asesoría y la formación. Una pata fundamenta es la oferta de formación para el corto plazo y para las necesidades a medio y largo plazo. Esa es una apuesta fundamental.

P. ¿La mejora de la formación permitirá avanzar hacia la flexiseguridad?

R. Ahí tienen que intervenir marcos normativos, reformas y avances sociales. Cuando hay una crisis en Euskadi el paro aumenta muchísimo pero en Europa no es así. Aquí hay que invertir en pedagogía y en acuerdos.

P. ¿Dónde queda Hobetuz en el nuevo esquema?

R. Queda por resolver si Lanbide podría tener las competencias sobre la formación continua, o se mantiene Hobetuz. Creo que Lanbide sería la plataforma adecuada, pero depende de un acuerdo institucional de los patronos de Hobetuz. Integrarla mejoraría los ratios de eficiencia y además abarataría costes. Creo que ya tienen poco juego con dos sindicatos fuera, lo oportuno sería la integración.

P. ¿Diría que en Euskadi el empleo es de calidad?

R. Respecto al del Estado sí, y si nos comparamos con Europa central menos. Nuestra especialidad en la Industria hace que tengamos una base sólida. Quizás en Servicios, el problema es mayor.

P. ¿Lanbide va a ser capaz de reordenar el sector de la promoción donde compiten pueblos, comarcas, diputaciones y mancomunidades?

R. En el sistema hay muchos intervinientes, sin coordinación y que no aportan demasiado valor, además de suponer un elevado gasto. Hay que afrontar una reflexión de fondo y una ordenación de todo el sistema. Pero eso no lo puede hace Lanbide, eso debe de hacerse a través de una regulación legislativa. La Ley Municipal reserva algunas competencias a los ayuntamientos, el resto debiera de ser en la Ley de Empleo.