Blanco asegura que la UE incluirá este año el eje mediterráneo como prioridad

Hechos frente a palabras. El PSOE aprovechó ayer la presentación de la candidatura de Elena Martín a la alcaldía de Alicante para marcar la línea roja entre la demagogia que en su opinión caracteriza al PP y la política de hechos socialistas. Y el ministro de Fomento, José Blanco, desgranó esta afirmación. "Nunca nadie va a hacer más por esta tierra en materia de infraestructuras que Zapatero", resumió tras cifrar en 8.400 millones las inversiones realizadas, "cuatro veces más de lo que invirtió el PP".

Blanco repasó algunas de estas inversiones -el AVE, la ampliación de L'Altet, la próxima inauguración en primavera de la autovía gratuita por el interior entre Alicante y Valencia- pero también aprovechó el acto para "adquirir un compromiso": Este año la Unión Europea incluirá "el corredor mediterráneo en el eje transeuropeo prioritario". Blanco incidió en el anuncio y tras lamentar que en 2003, cuando el PP gobernaba, la infraestructura no se contempló como una de las prioridades europeas porque los populares tienen una visión "radial" y "centralista" de España, aseguró que ha llegado el momento de su inclusión "porque hay un Gobierno socialista que sí cree en la España en malla".

Blanco intervino junto a la ministra de Sanidad, Leire Pajín, la candidata alicantina, Elena Martín y el secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, en un acto celebrado en el Paraninfo de la Universidad de Alicante. El recinto no se llenó. En su discurso, el vicesecretario general socialista defendió la necesidad de hacer reformas "para garantizar el Estado del bienestar" y la cohesión social.

En su intervención, el ministro también hizo referencia a la convención del PP en Sevilla y animó al presidente popular, Mariano Rajoy, a aplicar sus recetas en la Comunidad Valenciana. Así, dijo, cuando hablan de austeridad "deberían empezar por RTVV que está en quiebra. Incluso la pueden cerrar porque los ciudadanos así podrían tener una conexión más directa con la realidad".En la misma línea, el ministro de Fomento apostó por quitar vicepresidencias en la Generalitat y criticó al Consell por enviar las cartas en coche oficial porque se les ha cortado el servicio postal por falta de pago. "Que practique más [Rajoy] y predique menos", insistió Blanco.

El ministro, finalmente, también hizo un llamamiento contra la abstención y terminó diciendo que Rajoy es como la burbuja inmobiliaria: "las encuestas le sitúan por encima de su valor y pinchará". En varias ocasiones aseguró que no hay nada ganado pero que el PSOE no va a dar nada por perdido tampoco.

Alarte, mientras, unió sus críticas a la política de Camps con promesas que cumplirá si el próximo 22 de mayo gana las elecciones a la presidencia de la Generalitat. La dependencia fue su punto estrella. Así, prometió que al día siguiente de los comicios pondrá a trabajar a todo el cuerpo administrativo para resolver en un plazo máximo de 30 días "todas las peticiones pendientes. Y a los que no se les haya contestado, será que sí".

"Nuestra primera ley será para la dignidad, pues es hora de que en esta tierra se pida perdón a los 32.000 familiares de personas que han muerto sin que nadie les conteste a sus peticiones de la Ley de Dependencia", añadió el líder de los socialistas valencianos, que también anunció que cambiará el decreto de incompatibilidades para que la Ley de Dependencia sea un derecho más y no anule otras ayudas a estos colectivos.

Alarte también planteó otras prioridades que pondrá en marcha si gana las próximas elecciones. Sobre RTVV no secundó la propuesta de cierre del ministro de Fomento y se limitó a anunciar su voluntad de destituir al director general del ente público al día siguiente de los comicios autonómicos y también a garantizar que el PP saldrá "todos los días en Canal 9 a dar su opinión".

En su intervención, el responsable de los socialistas valencianos hizo un llamamiento al trabajo de la militancia de cara a las próximas elecciones. "Dirijámonos a la gente para explicarles qué nos ha pasado en los últimos 15 años", reiteró. Alarte defendió que "casi todo de lo que la gente se siente orgullosa" se construyó en los gobiernos socialistas de la Generalitat desde 1983 a 1995. Y como contraposición, añadió, ahora la Comunidad Valenciana tiene más paro que el resto de España y tiene carencias de todo tipo. Y terminó vinculando la forma de hacer política socialista con la honradez. Y la política popular con "especulación, ruina y corrupción".

Los casos de corrupción que salpican al PP valenciano de norte a sur fueron mencionados en las distintas intervenciones aunque ocuparon un lugar secundario. Elena Martín, por ejemplo, aseguró que la palabra "Brugal" le produce "vergüenza". "Cuánta basura", criticó.

La candidata socialista a la alcaldía de Alicante aseguró en su intervención su voluntad de abrir el Ayuntamiento de Alicante a todo el mundo y de trabajar por todos "y no para unos pocos".

La ministra de Sanidad, Leire Pajín, por su parte, defendió el perfil social y cívico de Martín y su dilatada trayectoria de ayuda a los colectivos desfavorecidos.

La convención del PP también ocupó una parte del discurso de Pajín. "Hay que tener mucha cara dura para hablar de despilfarro autonómico en una convención donde los ejemplos más claros son Esperanza Aguirre, Gallardón y Camps", criticó. La ministra de Sanidad aseguró que en el fondo del debate se esconde una forma de hacer política por parte del PP en la que "siempre pierden los ciudadanos". Pajín recordó que hace 20 años Felipe González y Joan Lerma tampoco lo tuvieron fácil para hacer las reformas que han hecho posible el avance del país e insistió en la responsabilidad ahora de hacer lo propio para garantizar el futuro.