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Tentaciones
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Reportaje:EN PORTADA

El cine español ya tiene receta

EXPRIME LA TELE. "Hay un star system televisivo con el que la gente joven se siente muy identificada", asegura Alfonso Albacete, que con David Menkes rodó en 2009 Mentiras y gordas, primer bombazo en taquilla de este subgénero. Un firmamento esculpido en gimnasios más que en escuelas de interpretación; catapultado vía productoras de tele, y no de cine; y envuelto en estilismos que van de Bershka al product placement al mejor postor. Avatares, en suma, de un nuevo público español. Ese que va al cine a reconocerse y ya no a conocerse.

ESTILIZA A LOS 'LOSERS'. La poética del perdedor posiblemente sea el secreto de su éxito. Ya sea por taras físicas (Fuga de cerebros, foto), por una mal asumida sexualidad (Mentiras y gordas), por una delicada situación familiar (Tres metros sobre el cielo) o por todo a la vez (Carne de neón, Café solo o con ellas), aquí el loser hace de la exclusión social y del no future terreno abonado a la fotogenia de revista teen. Una catarsis identitaria de publicidad y videoclip donde hay que evitar, claro, toda contextualización social o política.

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TEN FLUIDEZ MORAL. "Muchos creen que las pelis tienen que atender a una razón ética. Ver las que ensalzan algo inmoral resulta chocante", comenta Jimina Sabadu, guionista de la reivindicable precursora del género, La máquina de bailar (2006, foto). La acusación más común con estas cintas es la de "inmoral" cuando se acerca a temas como los de la violencia de género, el pastilleo o la sexualidad. Acercamientos que han sido la excusa para acusaciones en torno a la supuesta mala influencia de los valores que podrían vehicular a la generación Ni-ni.

PASA DE LA CRÍTICA. Ninguna de estas cintas ganará en Cannes o se colará en las páginas de Cahiers du Cinéma. Obras como 3MSC, como mucho, acumularán el odio de las revistas especializadas. "La crítica se ha quedado en que el cine tiene que enseñar a la gente", comenta Sabadu. Pues no, gracias. Sus creadores defienden su naturaleza intelectual-free reivindicando el cine lúdico con la industria norteamericana como referente. "Hay que ser muy honesto: esto es puro divertimento", recuerda Albacete.

TOMA LAS REDES SOCIALES. Solo un foro como Facebook podría acoger el Test sexual de Carne de neón, con el que descubrir tus secretos más lascivos y los de tus amigos. Imposible entender la amplitud del fenómeno new choni sin parar en Internet, nido donde desarrollar narrativas complementarias a las del producto madre. La lógica transmedia sirve de motor de un género que no cuenta con el apoyo de los medios de difusión tradicionales y acaba aupado como fenómeno cultural a espaldas del establishment.

<b>Fotograma de la película <i>Fuga de cerebros,</i> de Fernando González Molina</b>
Fotograma de la película Fuga de cerebros, de Fernando González Molina

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