La LOUA atrapa a Román

Carratraca, un pequeño municipio que ejerce de rótula entre las comarcas malagueñas del Guadalhorce, Ronda y Antequera, vivió en enero de 2010 un singular episodio de insurrección urbanística. El entonces alcalde, Óscar Román, de IU, presentaba la dimisión de su cargo de regidor para no tener que aplicar la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) y sancionar y ordenar el derribo de las cerca de 100 viviendas irregulares que existen en la localidad. "No quiero convertirme en el verdugo de mi pueblo", proclamó entonces Román, de 46 años.

El ex regidor se topó ayer de frente con la misma ley del suelo que se negó a aplicar contra sus vecinos. El Juzgado de lo Penal número 8 de Málaga, dio a conocer ayer una sentencia que lo condena a un año de prisión y ocho de inhabilitación para el cargo de alcalde por prevaricación urbanística. Los hechos por los que ha sido condenado Román se remontan a enero de 2002. En esa época, cuando la burbuja inmobiliaria comenzaba a hincharse en toda España, el ex alcalde permitió la segregación ilegal de una parcela rústica. La licencia se otorgó pese los informes en contra del arquitecto y el secretario accidental del municipio. El juez considera que el entonces alcalde actuó "con pleno conocimiento de la normativa urbanística aplicable e infringiendo de modo evidente la previsión legal".

Román anunció que recurrirá la sentencia ante la Audiencia Provincial. Sin embargo, en un gesto poco habitual en estos tiempos presentó su dimisión como concejal raso y como cargo de confianza en la Diputación de Málaga, algo que había anunciado que haría en caso de recibir una sentencia desfavorable. El ex regidor ejercía hasta ayer como director del área de Juventud, Deportes y Formación.

"No es lógico dentro de una formación política como IU y no está dentro de nuestras líneas que personas imputadas, o en este caso condenadas como yo, aunque no sea sentencia firme, mantengan puestos de estructura", afirmó Román en declaraciones a Europa Press para explicar su segunda dimisión en un año por motivos urbanísticos.

Izquierda Unida aceptó la renuncia del ex regidor de Carratraca: "Esperamos y deseamos que se demuestre su inocencia, pero la organización es en todo momento consecuente con lo que defiende y actúa con rapidez", afirmó la coalición en un comunicado.