El crimen, según Chabrol
El director, montador, guionista y productor de cine Claude Chabrol nos dejó en 2010, pero la Filmoteca Española lo recuerda este enero con una retrospectiva en los cines Doré con la que disfrutar de las grandes obras del francés y descubrir algunos de sus filmes menos conocidos. Un director cuyo nombre siempre irá de la mano de la Nouvelle Vague pero, también, del crimen como excusa para destripar a la burguesía. Y de la mano, claro, de una de sus musas: Isabelle Hupert.
El tándem crimen-Huppert se podrá paladear durante esta semana con La ceremonia (1995) y Un asunto de mujeres (1988). Si en la primera película el crimen es grabado en su versión más doméstica adaptando una de las mejores novelas de Ruth Rendell, en la segunda, es leído desde su versión más escalofriante: la del crimen de Estado. Dos pequeñas obras maestras para reflexionar sobre las consecuencias de la vigencia del sistema de clases. Hay en este ciclo mucho más. Como el romance teñido de sangre en Inspecteur Lavardin (1986), la adaptación del truculento romance escrito por Patricia Highsmith en Le cri du hibou (1987) o el asesinato según la era de la información en Masques (1987). Un menú perfecto. Para lo que se tercie.
