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AVA denuncia que el comercio se burla de los productores citrícolas

Aguado asegura que apenas cuatro empresas firman contratos en el campo

El modelo de contrato para la compraventa de cítricos en el campo que se pactó en el seno de Intercitrus en julio pasado ha quedado en papel mojado. "Dos no firman si uno no quiere", sentenció ayer Cristóbal Aguado, presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), antes de lanzar una virulenta carga contra los representantes del comercio en el seno de Intercitrus -la organización que agrupa a productores, comerciantes e industriales del sector citrícola. El modelo de contrato fue bendecido por todas las partes, por todas las Administraciones y estaba llamado a constituir un hito para las transacciones agrícolas. Por primera vez en la historia, productores y comerciantes aseguraron estar de acuerdo en fijar por escrito las condiciones de venta de los cítricos. Sin embargo, apenas cuatro empresas comercializadoras se han adherido al modelo de contrato que llegó a publicarse en el Boletín Oficial del Estado. Aguado las citó una por una: "Solo cuatro empresas han hecho contratos: Frutas d'Or, Brío, Alba y Fruixeresa. Las otras 500, no". Los nombres de las cuatro empresas se han obtenido a partir de un sondeo entre los 20.000 socios de AVA que producen cítricos. Aguado las citó como modelo. Y cargó contra las demás: "Uno de los firmantes del modelo de contrato hace de su capa un sayo y se burla de los agricultores. Nos hacen perder el tiempo con reuniones y con falsas expectativas. Echo de menos un pronunciamiento de la Administración para penalizar a los que no usan el contrato pactado, que les niegue subvenciones o ayudas. El hecho es que el acuerdo para impulsar el contrato es un fracaso por la falta de seriedad del comercio".

"Frutas d'Or, Brío, Alba y Fruixeresa firman contratos. Las otras 500, no"
AVA estima en 146 millones de euros las pérdidas por las últimas heladas

Según Aguado, la inmensa mayoría de las compras de cítricos en el campo se siguen cerrando a resultas, es decir, sin ninguna garantía de un ingreso mínimo para el agricultor. El precio se vincula a los ingresos que pueda obtener el comerciante. El presidente de AVA estimó que el precio medio que se está pagando por kilo de naranjas a los agricultores ronda los 12 céntimos de euro. El mínimo estimado para cubrir gastos y obtener un beneficio de subsistencia ronda los 25 céntimos por kilo.

Pero el sector agrícola es complejo. Los técnicos de AVA han elaborado una estimación de las pérdidas provocadas por las heladas de esta semana que cifraron en 142 millones de euros en cítricos y otros cuatro millones en hortalizas. "Es lamentable que para muchos agricultores resulte más beneficioso que les periten una helada grave que vender la cosecha", dijo. Pero también alertó sobre la posibilidad de que miles de toneladas de cítricos supuestamente dañados acaben llegando al mercado de forma irregular.

Al margen de los cítricos, Aguado dibujó un panorama desolador para el sector agrícola con pinceladas sobre el aumento de robos de materiales con algún valor tecnológico en el campo hasta el alza de la luz que dispara los costes del riego.

El presidente de AVA exigió "reglas del juego claras" para competir en igualdad de condiciones con los productores agrícolas de otros países. Concedió un voto de confianza al rumano Dacia Ciolos, comisario de Agricultura de la Unión Europea, que se ha pronunciado insistentemente en favor de los productores. Y reivindicó el impulso de buenas prácticas agrícolas con apoyo de las Administraciones para garantizar el uso de, por ejemplo, el contrato citrícola.

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